¿Y si tuviéramos baterías gigantes para almacenar la energía renovable? Ya existen y son así

La tarea pendiente de las renovables es disponer de baterías que sean más eficientes almacenado energía. Ese objetivo se va alcanzando.

Mario Picazo

Mario Picazo

Con el boom de las renovables y el impulso de las nuevas tecnologías, se están construyendo cada vez más instalaciones con sistemas de almacenamiento de energía capaces de abastecer a cientos de miles de hogares. 

La llegada de la tecnología de “baterías grandes” supone un desafío clave para la llamada energía verde. Esta tecnología de almacenamiento que tanta falta hace se está desarrollando en un bien número de países del mundo, aunque a la cabeza se encuentra concretamente California en Estados Unidos.

Cada vez tenemos baterías más eficientes gracias a la fuerte caída de los precios y el progreso tecnológico que permite que las baterías almacenen cantidades cada vez mayores de energía. Las redes de almacenamiento de energía están experimentando un crecimiento récord, no solo en Estados Unidos, en todo el mundo

En la actualidad la tecnología más avanzada de almacenamiento de energía renovable con baterías de alta capacidad se desarrolla en California, y el resto del mundo está siguiendo rápidamente sus pasos. Es un avance prometedor que ayudará sin duda a reducir el uso de combustibles fósiles que favorecen el cambio climático.

En la actualidad la tecnología más avanzada de almacenamiento de energía renovable con baterías de alta capacidad se desarrolla en California

Entre los sistemas de almacenamiento más destacados en tiempos recientes, se encuentran un sistema de 409 megavatios en el sur de Florida, Estados Unidos, una planta de 320 megavatios cerca de Londres, Inglaterra, una instalación de 200 megavatios en Lituania y una unidad de 112 megavatios en Chile.

El despliegue masivo del almacenamiento, podría servir para superar uno de los mayores obstáculos para la energía renovable, el ciclo que existe entre el exceso de oferta cuando brilla el sol o sopla el viento y la escasez cuando el sol se pone o el viento amaina. 

Según los defensores de los sistemas de almacenamiento, si se consiguen superar los desequilibrios entre la oferta y la demanda, las baterías podrían reemplazar a las plantas de combustibles fósiles. En la actualidad, muchas de ellas solo se activan durante unas horas al día cuando la demanda de energía se dispara. 

Los expertos insisten que el almacenamiento de energía generalizado es clave para ampliar el alcance de las energías renovables y así acelerar la transición a una red eléctrica libre de carbono. Cuanto antes se desarrollen baterías más eficientes, antes caerán los precios. En Estados Unidos, el precio del almacenamiento de baterías a escala de servicios públicos ya se ha desplomado, cayendo casi un 70 por ciento entre 2015 y 2018.

Esta fuerte caída de precios ha sido posible gracias a los avances en la química de las baterías de iones de litio, que han mejorado y mucho su rendimiento. La capacidad de energía se ha expandido rápidamente y las baterías pueden almacenar y descargar energía durante períodos de tiempo cada vez más largos. 

La competencia del mercado y el aumento de la producción de baterías también juegan un papel importante a la hora de reducir sus precios. Una proyección del Laboratorio Nacional de Energía Renovable de Estados Unidos, prevé, que el precio medio de las baterías de iones de litio caerán cerca de un 45 por ciento adicional entre 2018 y 2030.

Hoy estamos viviendo el crecimiento de la tecnología de baterías de iones de litio, impulsada principalmente por vehículos eléctricos y productos electrónicos de consumo. El dinero invertido en su investigación está reduciendo los precios en todos los frentes, algo como lo que ocurrió hace años con los paneles solares.

En California por ejemplo, la caída de los precios de las baterías, junto con el impulso agresivo que el estado ha hecho para disponer de una red eléctrica libre de carbono para 2045, ha llevado a una cartera repleta de proyectos de almacenamiento. 

En Europa el mercado de almacenamiento va más lento que en Estados Unidos debido a la política de desarrollo algo más conservadora

A pesar de su liderazgo en el desarrollo de energías renovables, Europa ha tardado más en incorporarse al mercado de almacenamiento. En ese sentido, la política de desarrollo es algo más conservadora que en Estados Unidos. En este sentido, se ha visto obstaculizada por un mercado de electricidad restrictivo, dominado por subastas gubernamentales que tienden a infravalorar el almacenamiento. 

Aún así, ahora están tomando forma algunos proyectos de baterías grandes, incluido el sistema Gateway de 320 megavatios que se construirá en una nueva instalación portuaria cerca de Londres.

Aunque el almacenamiento de energía prospera en mercados de alto valor, como el de California, los precios de las baterías aún necesitan bajar bastante para alcanzar un despliegue global a gran escala. 

Hace falta que aumenten los incentivos que ofrecen los gobiernos, para que un mayor número de sectores apuesten firmemente por los sistemas de almacenamiento. Los analistas son optimistas en cuanto al progresivo abaratamiento de las baterías, y eventualmente, creen que bajarán lo suficiente para su uso generalizado  en el almacenamiento de energía.