¿Un láser para controlar la caída de rayos?

La tecnología está de la mano de la meteorología en este nuevo proyecto diseñado para controlar los rayos y protegernos de su impacto.

Irene Santa

Irene Santa

La tecnología está de la mano de la meteorología en este nuevo proyecto diseñado para controlar los rayos y protegernos de su impacto

Desde que Benjamin Franklin inventara el pararrayos en 1751 el principio de funcionamiento de los sistemas de protección contra rayos no ha variado demasiado, pero gracias al proyecto europeo Laser lightning Rod (LLR) podría cambiar en los próximos años.

La mayor parte de los sistemas de protección de rayos no tratan de «parar» los rayos, como indica su nombre, sino que pretenden captar los rayos en una zona segura y conducir la descarga hacia Tierra, para así neutralizar la carga.

Esta nueva idea, que consiste en controlar la caída de los rayos vía láser, también pretende conducir las descargas eléctricas, pero no solo «provocando» a la atmósfera con la instalación de un punta metálica, sino ayudando a crear un camino de baja densidad del aire a través de la atmósfera.

Para ello, el LLR se sirve de un láser que, a través de pulsos repetitivos, iría creando este canal por el que circule la electricidad hasta llegar al pararrayos en forma de punta.

Para un láser de baja tasa de repetición, la densidad del aire se reduce inicialmente en un factor 5, un efecto que dura milisegundos con una densidad del 15% por debajo de la presión atmosférica normal.

Imagen: Lase Lightning Rod http://llr-fet.eu/

La Unión Europea trabaja en crear sistemas con los que proteger instalaciones vulnerables como centrales nucleares o aeropuertos

El aire no es normalmente un buen conductor de la electricidad y, de esta forma, las descargas verían su voltaje reducido en un 60%, ya que se producirían antes de la llamada ruptura dieléctrica del aire, cuando éste conduce la electricidad debido a un gran potencial eléctrico.

Laboratorio alpino

El LLR tiene su sede en el pico Säntis, al noroeste de Suiza. Se trata del pico más alto del macizo de Alpstein y allí se encuentra un observatorio y una red de sensores que registran constantemente datos. Es una localización clave porque allí suelen registrarse unos 100 rayos al año.

Imagen
Fuente: Laser Lightning Rod

Este proyecto que acabará en el año 2021 no solo ayudará a desarrollar nuevos sistemas de protección contra rayos, sino también a conocer mejor estos fenómenos y poder volcar los datos para realizar labores de investigación para seguir avanzando la tecnología.