Las 8 tormentas más devastadoras de la historia

Cuando el tifón Haiyan o Yolanda golpeó Filipinas en el mes de noviembre de 2013, el mundo se estremeció al contemplar las devastadoras consecuencias que la tormenta dejó a su paso, entre ellas, los más de 6.000 muertos y miles de heridos. Sin embargo, a pesar de su gran impacto, víctimas y daños causados, se queda lejos de ser la tormenta más mortal que golpea a Asia.

Aquí os mostramos ocho tormentas tropicales -conocidas como huracanes en el Atlántico, tifones en el Pacífico y ciclones en el Índico- que se han registrado como las tormentas más devastadoras de toda la historia.

2008 Ciclón Nargis

Nargis es conocida como la tormenta más mortal que ha azotado el sur de Asia, en concreto a las costas de Birmania.  Con vientos máximos sostenidos de 215 km/h y generando una ola gigante que avanzó hasta 35 kilómetros en tierra firme. En esta imagen de satélite se puede ver una comparación entre el instante antes de que la ola entrara en tierra firme y el después.

Nargis dejó más de 140.000 víctimas mortales a su paso, y esta cifra puede ser incluso mucho más alta, ya que muchos cuerpos se perdieron en el mar y nunca fueron encontrados. Los daños materiales fueron cuantiosos, con un total de 450.000 casas destrozadas, cientos de miles con daños importantes, 4.000 colegios destruidos y un 75% de los centros médicos más importantes, y todo esto en uno de los países más pobres del sur de Asia. Y por si las cosas podían ir peor, el gobierno impidió que entrara al país ayuda extranjera: barcos británicos, franceses y americanos repletos de víveres, medicamentos y ayuda humanitaria se vieron obligados a regresar a sus países de orígenes al negarse su entrada al país.

 

1991 Bangladesh

Esta tormenta que golpeó a Bangladesh es la primera de la lista de tormentas que han afectado a este país pero ni mucho menos la última. Con vientos de 235 km/h y mucho más devastadora que Nargis cuando toco tierra. La ola de más de 7 metros resultante que penetró en tierra dejó importantes inundaciones y una cifra de muertos que ascendió a los 140.000.

A pesar de que Bangladesh tiene una superficie de 147.000 km2 (3,5 veces mas pequeño que España) acoge un gran número de habitantes, en torno a los 150 millones (frente a los 47 millones aproximadamente que hay en España). Esto combinado con el hecho de que la mayoria de los bangladeses viven en las proximidades de los ríos  hizo que el número de víctimas se incrementara.

Los daños además aumentaron, cuando tras el paso de la tormenta, las aguas bajaron y más de 161.000 hectáreas de tierras de cultivo quedaron totalmente destrozadas.

1876 Ciclón de Backerganj, Bangladesh

Otra catastrofe para Bangladesh, esta vez en el siglo XIX, cuando aún pertenecia al imperio britanico. Este ciclón se formó en el golfo de Bengala y provocó una marejada ciclónica de 12 metros de altura, causando más de 200.000 muertes y la mayoría no por las inundaciones ni los fuertes vientos, sino por la hambruna y epidemias que asolaron la región tras el paso del ciclón.

1975 Tifón Nina, China

A pesar de que China es uno de los países más afectados por tifones en la Tierra, la catástrofe del tifón Nina y las muertes que dejó a su paso fueron más debidas a un fallo de ingeniería que a la tormenta en sí misma.

Nina se convirtió en una depresión tropical al poco de tocar tierra debilitándose cada vez más. A pesar de que sus vientos no fueron excesivamente fuertes, las torrenciales lluvias que llevó asociada la tormenta provocaron el colapso de la presa de Banquiao, lo que provocó su rotura y como consecuencia miles de muertos.

Esta presa principal, con 116 metros de altura, era conocida por tener varios defectos  que fueron reparados con el asesoramiento soviético en la década de 1970 y  era apodada como el «dique de hierro.»  Las fuertes lluvias que provocó el ciclón hicieron que la presa no pudiera soportar el peso del agua y se desplomara. A esto hay que añadirle las inundaciones que llegaron más tarde, las cuales provocaron la rotura de otras presas (hasta un total de 62), incrementando la cifra de muertos hasta los 229.000.

Aproximadamente 11 millones de personas se vieron afectadas por la tormenta y los daños como consecuencia de la rotura de la presa con pérdidas de más de 1.2 millones de dólares.

1981 Haiphong, Vietnam

Como ya hemos comentado, China es un destino muy común para los tifones, pero también lo es para su país vecino, Vietnam. Y es que en 1881, la ciudad vietnamita de Haiphong fue la diana de uno de los tifones más mortales que golpearon el este de Asia.

Aunque puede que no sea una ciudad de la que se oiga hablar comúnmente, hoy en día es la tercera ciudad más importante de Vietnam con un gran puerto en el norte y un gran centro industrial. Debido a su localización estratégica y su acceso marítimo, ya era un estratégico paso de comercio cuando los franceses empezaron a entrar en la región para colonizar Indochina. Desafortunadamente, la ciudad está situada en una zona muy cercana al mar y en el nacimiento del estuario de un gran rio. Por ello, cuando este gran tifón golpeó en 1881 la región, se encontraron totalmente desprotegidos.

Más de 300.000 personas perdieron sus vidas en la tormenta.

1737 y 1839: India

Estos dos ciclones, separados por un siglo, ayudan a ilustrar lo difícil que es determinar las cifras exactas de muertos por los fenómenos climáticos extremos, especialmente en épocas anteriores a la nuestra.

La tormenta de 1839, en la que un ciclón azotó la región de Coringa (en lo que es ahora el estado de Andhra Pradesh) aparece citada en varios lugares, en fuentes occidentales y de la India. No existe una fuente fiable en cuanto a las cifras de mortalidad (incluso hoy en día, cuando el mantenimiento de registros es más avanzado que nunca, existen problemas para el seguimiento de las cifras exactas), pero aproximadamente esta tormenta dejo cerca de 300.000 muertos, y produjo una ola de más de 12 m.

El ciclón de 1737 fue registrado como el ciclón más devastador del país, también con 300.000 muertos.

1970: el Ciclon Bhola, Bangladesh

Este devastador ciclón tropical dejó aproximadamente una cifra de 500.000 muertos tras su paso, principalmente debido a la gran ola o marejada ciclónica que provocó grandes inundaciones. Además el gobierno pakistaní fue duramente criticado por el manejo de las operaciones de ayuda humanitaria después del desastre, tanto por los líderes políticos locales como por los medios internacionales.