¿Tendremos una ola de calor en 2016 como la del año pasado?

Estas son las condiciones y los requisitos para que se produzca una ola de calor en nuestro país. ¡Atentos a las advertencias!

Jorge Robles

Jorge Robles

¿Se repetirá la terrible ola de calor del 2015? ¿2015? ¡Pero sí eso fue hace nada! Sí, pero batió muchos récords y permanece fresca en nuestra memoria, aunque quizás el término “fresca” no sea el más adecuando.

Hace unos días AEMET público un interesante estudio sobre las olas de calor acaecidas en nuestro país desde 1975. Quizás el informe sea un poco técnico, pero aporta datos muy interesantes que me propongo analizar en el presente post.

Pero para hablar con propiedad debemos primero despejar algunas dudas sobre lo que estamos hablando. En demasiadas ocasiones los medios de comunicación o los sufridos ciudadanos utilizan (o utilizamos) con gran frivolidad el término ola de calor para referirnos a un episodio de temperaturas elevadas.

Condiciones para que se dé una ola de calor


Temperatura umbral

En primer lugar hay que definir una  (o temperatura de “alerta”) específica para cada estación (por ejemplo, los 35º se rondan durante casi todo el verano en el Valle del Guadalquivir, mientras que esta temperatura es prácticamente sofocante en la Cornisa Cantábrica). Así, Aemet unifica criterios y para cada estación analiza todas las temperaturas registradas entre los meses de julio y agosto en el periodo de 1971 a 2000 (62 días/año x 30 años = 1860 días analizados), elige el 5% de días más calientes (es decir 93 días) y utiliza como umbral la temperatura más baja de estos días de calor (yo lo llamo “criterio del día 93” ;-). Así cada estación tiene su “temperatura de alarma”.

Duración del suceso

También es importante la duración del suceso. Así exigimos a las olas de calor que durante al menos tres días se superan los umbrales de calor. Menos de tres días no puntúa y se queda en calorcete (técnicamente “episodio de calor”).

VER TAMBIÉN: Cómo evitar la angustia en verano por el calor

Extensión

Además es importante la extensión (ese “hasta dónde llega”) de la ola de calor. El criterio que impone Aemet (bastante acertado) es que alcance al menos el 10% de las provincias de la Península, Baleares, Ceuta y Melilla. Canarias por su localización geográfica merece capítulo aparte (además con 2 provincias tan solo es posible afectar al 50% o al 100%).

Intensidad

Otra dato valioso es conocer la “intensidad” de la ola de calor. Para ello, calculamos la temperatura media registrada en cada estación durante la ola, y al restarle la “temperatura umbral” obtenemos una “anomalía de ola” para cada estación. Sumamos las anomalías de todas las provincias afectadas y al dividirlo por el número de provincias obtenemos la “anomalía de ola total”. (Aunque leído parezca un lío se trata de matemáticas muy simples).

Temperatura máxima de la ola

Por último, otro dato curioso es conocer la “temperatura máxima de la ola”. Para ello, basta con localizar el día más cálido y hacer la media de las temperaturas máximas registradas en todas las provincias afectadas.

Las olas de calor en España



Con todo esto el estudio de Aemet nos indica que desde 1975 hasta hoy (finales de junio 2016) se han registrado 47 olas de calor en la Península, Baleares, Ceuta y Melilla y unas 37 en el archipiélago Canario.

En la Península, Baleares, Ceuta y Melilla, en cuanto a duración, se han registrado 7 grandes olas (que se prolongaron como mínimo una semana), incluyendo 2 olas extraordinarias. En 2003 tuvimos una ola de calor que duró 16 días y coincidió con la mayor ola de calor registrada en Europa.

Mientras que en 2015 sufrimos una ola de calor de 26 días. Empezó el 27 de junio y se prologó hasta el 22 de julio. Alcanzó una “anomalía de ola” de 3,4º (la cuarta en un hipotético ránking de calor) y el 15 de julio llego a afectar a 30 provincia (la quinta ola más extensa). El día más caluroso fue el 6 de julio, cuando se superaron los 40º en la mayor parte de la península, tan solo en el noroeste las temperaturas no fueron tan elevadas y “bajaron” el máximo de la ola a 37,6ºC (es lo que tienen las medias aritméticas).

VER TAMBIÉN: 5 noticias que tienes que leer para sobrevivir al calor

Se llegaron a registrar 45,2º en el Aeropuerto de Córdoba y en Montoro (también Córdoba). La mínimas oscilaron entre los 20 y los 25º en la mayor parte del país (tan solo en el noroeste se escaparon de sufrir estas noches tropicales).

La ola de calor de 2015


Durante la ola de calor del 2015 fueron muchas las estacionas que registraron un récord mensual. Zaragoza (Aeropuerto) llegaron a los 44,5º, 43,1º compartieron Granada (A) y Lleida, en Toledo se alcanzaron los 42,8º, en Girona (A) 41,3º, en Almería (A) y Ciudad Real 40,8º, en Huelva 40,7º, etc…

Durante estos 26 días tan solo se vivió un pequeño respiro térmico los días 2 y 11 de julio, aunque hubo zonas donde este alivio apenas llego a notarse, y en cualquier caso no llegó a ser suficiente para interrumpir la ola de calor.

El informe de Aemet también analiza otras olas de calor peninsulares y hace un repaso de las 37 registradas en Canarias en ese mismo periodo. Lectura recomendable sin duda.

¿Tenemos una ola de calor en 2016?


Y la pregunta del millón, ¿es posible que este verano se repita una ola de calor de tal magnitud? Los que de algún modo estamos relacionados con la meteorología te diríamos que, si se dan las condiciones adecuadas, perfectamente puede repetirse una ola de calor extraordinaria, ya que trata de configuraciones atmosféricas de gran estabilidad cuya persistencia no es particularmente difícil.

Así que en caso de ola de calor lo importante es seguir los consejos de las autoridades sanitarias para evitar golpes de calor y ante cualquier ola: hidratación, sombra y… ¡abanico para todo!

Te puede interesar: