¿Tendremos más borrascas como Gloria en el futuro?

La borrasca Gloria ha traído un temporal histórico al Mediterráneo. ¿Está el cambio climático detrás?

Mar Gómez

Mar Gómez

La borrasca Gloria ha traído un temporal histórico al Mediterráneo durante esta semana. Se han batido varios récords, entre ellos el de la mayor ola registrada en puntos de Mallorca y Menorca con más de 14 metros de altura.

Enero ha traído la séptima borrasca con nombre a nuestro país provocando un temporal poco habitual en estas fechas en la región mediterránea donde la nieve ha sido una de las principales protagonistas junto con el oleaje y las intensas lluvias.

Las olas han batido récords en el Mediterráneo convirtiéndose en las más grandes registradas en el Mediterráneo occidental con 8.44 metros de altura significativa en la boya de Valencia y más de 14 metros de altura máxima en Dragonera (Mallorca) y Mahón (Menorca).

En Barcelona en un solo día llovió más de lo que suele llover en los tres primeros meses del año.

La virulencia de este temporal ha sorprendido a muchos a pesar de los avisos de nivel naranja y rojo que se han activado esta semana y que indicaban la gravedad de los efectos de esta borrasca.

Sin embargo, también ha surgido la cuestión de si el cambio climático podría estar detrás de este tipo de fenómenos y si serán más frecuentes en el futuro.

Borrasca Gloria y temporales en el Mediterráneo ¿por qué tan graves?

Lo primero de todo, es necesario comprender por qué Gloria ha causado estos efectos tan adversos. La situación del anticiclón de las Azores desplazado hacia las Islas Británicas —donde, por cierto, se ha batido el récord de presión más alta jamás registrada— permitió junto con las bajas presiones en el Mediterráneo, que se produjese un “pasillo” de vientos desde el nordeste que permitió la entrada de aire frío.

Esto hizo que junto con los vientos húmedos de levante se generasen intensos vientos, oleaje y nevadas.

Ese aire frío en altura, que caracteriza a las DANAS, junto con la orografía del terreno y los vientos húmedos del Mediterráneo suele dar lugar a precipitaciones muy intensas en esta zona.

Esto es muy frecuente que ocurra a final del verano y otoño cuando, el mar Mediterráneo caliente, añade otro factor mas para el desarrollo de intensas precipitaciones.

Durante los meses de otoño, las gotas frías o DANAs se han vuelto mas virulentas, entre otras cosas, por el aumento de la temperatura del mar Mediterráneo. En este caso, este factor no ha estado presente en ‘Gloria’.

En este caso el mar no se encontraba caliente, pero si se han dado el resto de los ingredientes para que esta situación se tornara de lo más complicada.

Para poder saber si el cambio climático está detrás de la borrasca Gloria es necesario hacer estudios de atribución. La situación no ha sido para nada habitual, pero sí pueden darse este tipo de formaciones meteorológicas en esta época.

Se pueden estar produciendo cambios en la circulación general de la atmósfera, con ondulaciones de la corriente en chorro más notables que pueden producir estas entradas de aire frío y generación de borrascas con aire frío en altura.

Llueve sobre mojado, pero ¿más o menos que antes?

La situación es aun más grave cuando echamos la vista atrás y comprobamos que desde septiembre hemos vivido tres temporales importantes en el Mediterráneo. En zona como Murcia o Alicante aún se están recuperando de los efectos de la DANA de septiembre.

Según las afirmaciones que incluye Jorge Olcina en su libro “Climas y Tiempos del País Valenciano” en la Comunidad Valenciana no llueve menos en los últimos años, pero sí llueve diferente y de forma más concentrada.

Las lluvias de tipo convectivo son más frecuentes y sobre todo asociadas a las gotas frías, lo cual indica que pueden estar produciéndose cambios en la circulación atmosférica. Se aprecia, por lo tanto, un aumento de la torrencialidad de estas lluvias en la costa de Valencia y no solo en las lluvias sino en un aumento de las nevadas.

Mientras las heladas disminuyen, aumentan los días de nevadas en las zonas montañosas de la comunidad.

Pérdida de playas por temporales como Gloria

El Panel Internacional de Cambio Climático (IPCC) lo lleva avisando años en sus continuos informes. El aumento del nivel del mar es algo innegable.

Esto unido a la mala planificación urbanística de nuestras cosas — el 13% de la costa española está urbanizada— y a la mayor frecuencia de temporales extremos en el futuro, puede terminar eliminando algunas de nuestras playas más famosas.

*Fuente imagen destacada: Instagram/PlatgesdeNules