La primera persona que pise Marte podría ser mujer

La NASA comunica que «probablemente» la primera persona que ponga un pie en el Planeta Rojo sea una mujer.

ElTiempo.es

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La NASA comunica que «probablemente» la primera persona que ponga un pie en el Planeta Rojo sea una mujer

Queda mucho aún para que el hombre llegue hasta él, pero las quinielas sobre quién será la primera persona que pise Marte no paran. Ahora, el actual administrador de la NASA, Jim Bridenstine, ha dado algunas pistas de la posible identidad del privilegiado.

O más bien privilegiada, ya que este portavoz ha indicado que quizá sea una mujer la primera persona que «amartice» en el Planeta Rojo.

Aunque desde la NASA han comentado que se trata sólo de una opción, Bridenstine ha dejado ver que entra en las posibilidades que sea en esta ocasión una mujer astronauta la elegida para viajar por primera vez a Marte.

Los qu este dirigente sí ha confirmado es que las mujeres estarán incluidas en el próximo viaje de esta entidad a la luna. Un objetivo que, de momento, es más cercano. «Estamos esperando a la primera mujer en la luna», afirmó en el programa de radio Science Friday.

Hasta el momento han sido doce los hombres que han estado en la luna en distintas misiones. En cambio, ninguna mujer ha tenido esta oportunidad. El administrador de la NASA comentó que la entidad está «totalmente comprometida» para que esto suceda.

La NASA ha confirmado que las mujeres estarán incluidas en el próximo viaje de esta entidad a la luna

Muchas han sido las voces que han denunciado la «brecha espacial» en estos años. La NASA fue fundada en 1958, y desde entonces, ha contado con personal mayoritariamente masculino. Hoy en día, su compromiso por la igualdad ha mejorado estas cifras y un tercio de la plantilla ya es femenino, definiendo en 2016 incluso un cohorte de mujeres astronautas para garantizar el equilibro.

También se han encargado informes para analizar la capacidad de hombres y mujeres en las expediciones espaciales. Una de estas investigaciones, que fue financiada por la NASA, concluyó que las mujeres pueden tener una mejor capacidad biológica para defenderse de algunas de las disminuciones cognitivas asociadas con la radiación cósmica.