¿Se está produciendo una ola de calor global?

En las últimas semanas, las temperaturas en zonas como Siberia, el norte de Europa y EE.UU han superado registros históricos de calor extremo.

Pablo Ramos

Pablo Ramos

La situación climática parece estar sufriendo este verano una ola de calor más intensa que en años anteriores en todo el hemisferio norte. De hecho, en zonas de Siberia y Escandinavia las temperaturas rozaron los 40ºC, unos registros hasta quince puntos por encima de la media habitual en la región en esta época.

Pero no solo en Europa. La ola de calor global ha marcado registros superiores a los 52ºC en el Valle de la Muerte, al este de California en EE.UU. Además, estos extremos de las últimas semanas también están detrás del fallecimiento de hasta 70 personas en Quebec, Canadá, han provocado unos registros históricos en Japón, con máximas de más de 40ºC, y fueron, junto a los fuertes y calurosos vientos, uno de los factores principales de los fatídicos incendios de Grecia donde fallecieron más de 80 personas.

El 2018 se perfila como uno de los años más calurosos de la historia, con nuevos récords de temperatura

“La situación lleva siendo inusual en el norte de Europa desde hace semanas. Ha hecho más calor en Siberia que en Andalucía, algo bastante insólito”, señala Mar Gómez, doctora en Físicas y especializada en meteorología y miembro del equipo de Eltiempo.es.

En países como Suecia, Noruega o Reino Unido se han batido récords de temperaturas máximas que, muchos casos, sobrepasaron ampliamente los 30ºC lo que ha obligado a las administraciones a tomar medidas. “Asociado a este evento se han producido graves incendios en países como Suecia o se ha limitado la velocidad máxima en París a 20 km/h para evitar contaminar y aumentar los niveles de partículas contaminantes que ya de por si se incrementan con la estabilidad atmosférica”, apunta Gómez.

Un clima extremo en el verano de 2018

Por su parte, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) ha señalado a esta ola de calor global como “un clima extremo que ha marcado la primera mitad del verano en el hemisferio norte” provocando sequías, precipitaciones desastrosas e incendios devastadores. Unas condiciones que han tenido un impacto negativo en la salud, el medio ambiente y la agricultura, entre otros sectores.

«El 2018 se perfila como uno de los años más calurosos de la historia, con nuevos récords de temperatura en muchos países. Esto no es una sorpresa y es el resultado del cambio climático causado por las emisiones de gases de efecto invernadero. Este no es un escenario futuro. Está sucediendo ahora «, ha advertido en un comunicado la vicesecretaria general de la OMM, Elena Manaenkova.

Unas olas de calor más probables e intensas

Los expertos de la Universidad de Oxford señalan que esta situación sin precedentes durante el verano de 2018 en Europa es sólo el anticipo de lo que ocurrirá en los próximos años. Según sus estimaciones, el cambio climático ha aumentado las probabilidades sufrir una ola de calor como la actual en más del doble.

“Junto con este factor, se une la configuración atmosférica propia de cada época y es cierto que desde febrero, con el calentamiento súbito estratosférico y la posterior ruptura del vórtice polar se han producido cambios en la dinámica atmosférica que han acabado desembocando en los cambios actuales”, destaca Gómez entre otros factores que influyen en este aumento.

Agosto comienza más cálido de lo normal, con esta ola de calor que se mantendrá toda la semana

En el caso de España, y a pesar de los registros extremos de estos primeros días de agosto, a falta de datos oficiales, las estimaciones indican que los registros del mes de julio han sido más frescos de lo habitual. “En cambio agosto comienza más cálido de lo normal, con esta ola de calor que se mantendrá toda la semana y que a pesar de que aflojen algo los valores, seguirá haciendo mucho calor al menos toda la primera quincena del mes”, vaticina Gómez.