Tu ropa también contamina, ¿sabes cuánto?

Pablo Ramos

Pablo Ramos

La industria textil es una de las más contaminantes del planeta por la emisión de gases y la utilización de productos químicos en la fabricación de prendas.

Un pantalón vaquero, una camiseta o una sudadera son algunas de las prendas más vendidas en las tiendas de ropa. Sin embargo, para que podamos disfrutar de novedosos diseños de manera constante, la industria de la moda emite toneladas de gases contaminantes a la atmósfera y gasta millones de litros de agua, tanto en el proceso de fabricación como en el traslado de sus productos.

Tal y como detalla la ONU, la industria de la moda es una de las más contaminantes y las emisiones totales de gases de efecto invernadero en la producción de prendas es de unos 1.200 millones de toneladas anuales. Unos contaminantes superiores a la suma de toda la polución emitida por los aviones de vuelos internacionales y el transporte marítimo combinado. Además, debido al aumento de la demanda, se espera que las emisiones del sector textil se incrementen en un 60% en 2030.

Más concretamente, un trabajo de la Agencia de Medioambiente y control de Energía de Francia (ADEME), realizado en 2014, señala por ejemplo que para fabricar un sólo pantalón vaquero se requieren más de 2.000 litros de agua, unos diez kilos de productos químicos y tintes en su proceso de fabricación y la emisión de un equivalente de 13 kilos de dióxido de carbono.

Si el pantalón tiene efecto “usado” o “desgastado” también se utiliza otros componentes químicos. Además, hay que añadir la contaminación que se genera tanto en cada lavado, con más del 1.000 litros de agua en los años que dure la prenda, como en la energía necesaria para su planchado y secado.

Nuevos desafíos de moda sostenible

Según las estimaciones de la Asociación Ibérica de Reciclaje Textil (Asirtex), cada ciudadano español compra unas 34 prendas anualmente y tira entre doce y quince kilos de ropa, aunque la mayoría de esa ropa se vende como productos de segunda mano.

«El sector de la moda tiene un gran desafío: las cadenas de suministro complejas, desde los productores primarios hasta las tiendas minoristas, y la demanda en rápido crecimiento con reciclaje limitado», señaló Niclas Svenningsen, uno de los responsables del proyecto de colaboración entre la industria de la moda y la lucha contra el Cambio Climático en la ONU. «Las acciones que la industria ya está haciendo y su voluntad de participar con entusiasmo en el clima y el desarrollo deberían darnos toda esperanza, pero hay mucho por hacer», advierte Svenningsen.

La moda sostenible, presente en la cumbre del clima

Uno de los ejemplos de este aumento de conciencia social con respecto a los daños de la industria textil en el medioambiente es la ponencia que hará el próximo día 10 de diciembre la diseñadora Stella McCartney en la cumbre del clima COP24 que se celebra estos días en Polonia. Una charla en la que se espera que la diseñadora aborde esta problemática, llame a una acción coordinada manera global para fabricar moda sostenible, más respetuosa con el medioambiente, que reduzca así las emisiones de gases contaminantes.

Stella McCartney es una de las profesionales más comprometidas del sector y que ha conseguido fabricar con “cuero vegano”,  gracias a poliéster reciclado, un mítico modelo de zapatillas deportivas de Adidas. Además, este año ha lanzado su colección «Veg Gang», focalizada en el público infantil y fabricada con algodón orgánico, materiales reciclados y sostenibles, con diseños llamativos centrados en el mundo vegetal y de la alimentación saludable con diseños y motivos originales referidos a calabaza, remolacha o brócoli, entre otros.

«La moda rápida es responsable de la mayor parte del impacto ambiental, por lo que son el elemento más importante para lograr un cambio real y realmente no tenemos mucho tiempo, para cambiar las cosas. Pero honestamente creo que es factible y no podría hacer lo que hago si no lo creyera”, ha señalado Stella McCartney sobre el mundo de la moda sostenible.

Recogida de ropa y moda reciclada

Otra de estas iniciativas es la que ha puesto en marcha en los últimos años el gigante de la moda Inditex. La colección Zara Join Life dispone de un etiquetado específico para que los clientes puedan conocer que tanto el proceso de producción como las materias primas utilizadas se realizan de la manera más sostenible. Desde prendas fabricadas con algodón orgánico o fibras recicladas hasta ropa producida con innovadora tecnología para ahorrar agua y reducir las emisiones de gases contaminantes. “Nuestro objetivo es que nuestros productos sean cada vez más sostenibles”, detallan desde la compañía.

De hecho, según ha anunciado recientemente la compañía, Inditex ha sido nombrada por tercer año consecutivo como la empresa del sector textil con mejores prácticas en materia medioambiental, social y económica del mundo, según el Índice de Sostenibilidad de Dow Jones.