Se designa en meteorología a un volumen limitado de aire frío en los altos niveles de la atmósfera, que en un mapa meteorológico se representa rodeado con isotermas cerradas. El diámetro de una gota fría puede alcanzar a tener unos cientos de kilómetros. Es homogéneo y sin frentes que lo separe de las masas que lo rodean, y tiene una influencia determinante sobre e tiempo. La gota fría conduce generalmente a una circulación atmosférica de bloqueo donde se asiste a la formación de una depresión aislada de niveles altos (DANA) de la atmósfera. Las gotas frías altas, entre 1.000 y 10.000 metros, son regiones de baja estabilidad, mientras que las gotas frías bajas son zonas de aire relativamente estable.
