Los volcanes más voraces de la historia

Mar Gómez

Mar Gómez

Se puede decir que los volcanes rivalizan con los terremotos como los fenómenos más poderosos y destructivos de las fuerzas de la naturaleza. Una erupción volcánica puede alterar el clima de nuestro planeta, poner fin a una civilización, causar destrucción, cobrarse numerosas vidas y dejar una huella en la humanidad. A continuación hemos elaborado una lista de los volcanes que, por una razón u otra, han hecho historia.


1980: Monte Santa Helena, Estado de Washington

La erupción del monte Santa Helena fue una de las erupciones volcánicas más catastróficas del siglo pasado. El 18 de mayo de 1980 un terremoto sacudió la Tierra y la cara norte del volcán se desplomó. Una gran columna de cenizas volcánicas se elevó hacia la atmósfera llegando a depositarse hasta en 11 estados diferentes. 57 personas (entre ellas el vulcanólogo que estaba monitorizando la montaña en los días previos) y miles de animales murieron, cientos de kilómetros de terreno fueron arrasados y más de mil millones de dólares en pérdidas materiales.

La cifra de muertos podría haber sido mayor, y sin embargo, hay grandes historias de supervivencia:

1783: El monte Laki, Islandia

La erupción de Laki constituye la peor catástrofe en la relativamente corta historia del país. Según informes, la erupción del monte Laki duró ocho meses. Los efectos directos del volcán mataron a 9.000 personas y arrasaron todos los campos de cultivo de la isla, causando aún más muertes y daños. Se cree que aproximadamente una cuarta parte de la población murió en su erupción.

Más allá de la isla, la enorme cantidad de ceniza que se expulsó a la atmósfera afectó al clima en todo el mundo. Se formó una bruma espesa en EEUU, se perdieron las cosechas en Europa y Egipto y algunos investigadores sugieren que incluso pudo haber afectado a los monzones asiáticos. La niebla de la erupción no se disipó hasta el otoño de ese año, lo cual hizo empeorar la situación, dando paso al invierno más duro de los últimos 250 años debido a la acumulación del calor al absorber dióxido de sulfuro en la estratosfera. Fue la segunda mayor erupción en los últimos 1.000 años, solamente por detrás de la del Tambora en Indonesia.

Hoy en día, los volcanes de Islandia pueden afectar seriamente a sus países vecinos, como sucedió en 2011 cuando la erupción del Grímsvöt obligó a cancelar cientos de vuelos europeos.

1902: el monte Pelee, Martínica

Esta erupción volcánica ocurrió en mayo de 1902 en la isla francesa de Martinica dejando 29.933 víctimas. Esta erupción ha sido considerada una de las más violentas del siglo XX, sólo la supero el monte Pinatubo en 1991 y el Santa Helena en 1980. Los supervivientes de esta erupción incluyen a un preso que se encontraba en una celda subterránea,  varios marineros fuera de la costa que fueron testigos de la tragedia y un carpintero que, aunque sufrió graves quemaduras, sobrevivió.

79 d.C: el monte Vesubio

La erupción del monte Vesubio duró cerca de 19 horas liberando grandes cantidades de ceniza y roca y afectando a Pompeya. Sabemos mucho sobre el monte Vesubio porque uno de los historiadores más conocidos de la antigüedad, Plinio el Joven, estaba cerca cuando la montaña explotó en su parte superior. Su tío, también Plinio, estaba al mando de la flota romana y ayudó a evacuar a algunos de los supervivientes.

Se estima que en Pompeya vivían entre 10.000 y 25.000 personas. No se sabe con exactitud cuanta gente pereció en la erupción pero se han recuperado restos de 1.150 cuerpos. La mayor erupción del volcán se produjo en 1944 y desde entonces ha permanecido inactivo.

Segundo milenio antes de Cristo: Santorini/Thera, Grecia

La isla de Santorini, famosa por sus brillantes casas blancas y tejados azules era entre 1000-2000 a.C la isla de Thera y estaba siendo destruida por un cataclismo devastador. La fecha aproximada del suceso fue el 1627 a.C. Debido a su erupción, se produjeron olas de hasta 25 metros de altura que causaron en el litoral mediterráneo una cifra de muertos que se estima en 250.000 personas, el 80% de la población.

Una de las causas del fin de la cultura minoica, una civilización pre-griega basada en lo que es hoy Creta, se cree que estuvo en la erupción volcánica y posteriores tsunamis. Esto fue un gran problema, ya que esta cultura creó alguna de las primeras formas de escritura, alguna de las cuales tan sofisticadas que hoy en día siguen sin descifrarse.

1883: el monte Krakatoa, Indonesia

La erupción del Krakatoa ha sido una de las erupciones volcánicas más poderosas que se produjeron a finales del siglo XIX. El volcán explotó a finales de agosto de 1883. La explosión fue uno de los sonidos más fuertes que se hayan escuchado por la humanidad, audibles a más de 3.000 km de distancia en Australia y el archipiélago de Mauricio en el Océano Índico.

La fuerza de la explosión provocó tsunamis y envío trozos de roca y piedra pómez que pesan cientos de toneladas en el aire. La nube de cenizas se elevó 32 kilómetros en el aire y el número de muertos se cree que superó los 35.000.

En 1928 un nuevo volcán comenzó a emerger desde el mar en medio de la isla devastada. Anak Krakatoa, o también conocido como Hijo de Krakatoa, está todavía muy activo. Hasta el momento ha emergido 300 metros sobre el nivel del mar.

1815: el monte Tambora, Indonesia

Cuando este volcán en Indonesia entró en erupción y expulsó su ceniza a la atmósfera, se creó un evento de enfriamiento global de corta duración. De hecho en 1816, se produjo lo que se conoce como “el año sin verano”, un año caracterizado por un descenso entre 0.4-0.7ºC de la temperatura global debido a la combinación de la expulsión de cenizas volcánicas a la estratosfera y a un mínimo de la actividad solar. Aproximadamente 10.000 personas murieron en Indonesia debido a su erupción o a los tsunamis que le siguieron. Otras 80.000 murieron como resultado de la desnutrición.