‘Los niños del cambio climático’: una amenaza para toda una generación

Durante los próximos años el cambio climático afectará especialmente a los más pequeños. Lo confirma un estudio reciente y estos son los detalles.

Mario Picazo

Mario Picazo

Los niños y las mujeres, entre los grupos de población que más notarán los efectos del cambio climático

El último informe ¨The Lancet Countdown¨ sobre salud y cambio climático alerta de que un niño nacido hoy, vivirá en un mundo cuatro grados más cálido que el promedio preindustrial. Un mundo en el que el cambio climático afectará la salud humana desde la infancia y la adolescencia hasta la edad adulta y la vejez.

Los niños serán el grupo de edad más afectado por el cambio climático en todos los continentes, y el impacto que sufran dependerá del grado de acción o inacción humana frente al actual calentamiento del planeta. 

El mundo ya ha observado un aumento de temperatura de 1°C por encima de los niveles preindustriales, con ciclos de retroalimentación y amplificación polar que han dado lugar a un aumento de hasta 3°C en algunas zonas del Ártico.

Ocho de los diez años más cálidos se han registrado en la última década, y ello se debe principalmente al progresivo aumento de la combustión de productos fósiles. Los esfuerzos por mitigar ese aumento es, en el mejor de los casos, intermitente, y las emisiones de dióxido de carbono continúan aumentando este 2019. 

Consecuencias de la menor producción de alimentos en los niños

El informe hace especial hincapié en el impacto que una reducción en la producción de alimentos tendrá sobre los más pequeños. Un descenso del rendimiento global de los principales cultivos amenaza la producción de alimentos, y en general la seguridad alimentaria.

La población infantil sería la que más notaría los efectos casi permanentes de la desnutrición.

Un descenso del rendimiento global de los principales cultivos  amenaza la producción de alimentos, y en general la seguridad alimentaria

En muchas zonas del mundo, los niños se encuentran entre los más susceptibles a las enfermedades diarreicas y experimentan los efectos más graves de la fiebre del dengue.

Las tendencias en la idoneidad climática para la transmisión de diferentes enfermedades son particularmente preocupantes. En regiones tropicales, 9 de los 10 años más favorables para la transmisión de la fiebre del dengue, se han registrado desde el año 2000.

Del mismo modo, desde principios de la década de los 80, el número de días adecuados para la propagación de enfermedades relacionadas con el Vibrio, un patógeno responsable de parte de la carga de la enfermedad diarreica, se ha duplicado.

Cambio en la capacidad vectorial global del virus del dengue desde 1950 para los vectores Aedes Aegypti y Aedes albopictus. Fuente: The Lancet

Durante la adolescencia y a edades mayores, la contaminación del aire, debido principalmente a la quema de combustibles fósiles y exacerbada por el cambio climático, daña el corazón, los pulmones y los principales órganos vitales.

Los efectos se acumulan con el tiempo, afectando también a edades adultas. De hecho,un buen número de fallecimientos a nivel global se atribuyen a las elevadas concentraciones de partículas ambientales finas (PM2.5). En 2016 la contaminación atmosférica a nivel global se cobró la vida de cerca de 7 millones de habitantes, la mayoría en países poco desarrollados. 

En 2016 la contaminación atmosférica a nivel global se cobró la vida de cerca de 7 millones de habitantes

En una etapa posterior de la vida, las familias, se ven amenazadas por el aumento de la frecuencia y gravedad de las condiciones meteorológicas, que cada vez son más extremas.  

Mujeres y cambio climático

Las mujeres se encuentran también entre el grupo de población más vulnerable al impacto de esos cambios. Por ejemplo, a nivel mundial, el 77% de los países han experimentado un aumento en la exposición diaria de la población a incendios forestales.

Promedio anual del número de personas expuestas a incendios en 2018. Fuente: The Lancet

Las poblaciones mayores de 65 años también son particularmente vulnerables a los efectos que el cambio climático tiene en la salud, especialmente durante olas de calor.

De 1990 a 2018, las poblaciones de todas las regiones se han vuelto más vulnerables al calor y a las olas de calor, siendo las de Europa y el Mediterráneo Oriental las más afectadas.

Solo en 2018, 220 millones de personas experimentaron exposiciones a las olas de calor en todo el mundo, rompiendo el récord anterior de 209 millones establecido en 2015.

Cambio en el número de episodios de olas de calor que afectan a personas mayores de 65 años, comparado con los registros entre 1986-2005.

El calentamiento global y las olas de calor regionales también limitan cada vez más la capacidad laboral en algunas regiones de la tierra. En 2018, se perdieron 133.600 millones de horas potenciales de trabajo a nivel mundial.

Como ejemplo, en el sur de Estados Unidos, perdieron entre un 15 y 20 por ciento de potenciales horas de trabajo diurnas durante el mes más caluroso de 2018.

Horas potenciales de trabajo pedidas por sector, debido al calor entre 2000 y 2018.
Fuente: The Lancet

Si mantenemos la trayectoria actual para reducir la quema de combustibles fósiles, la vida de cada niño nacido hoy se verá seriamente afectada por el cambio climático resultante. Sin una intervención acelerada, esta nueva era llegará a definir en no mucho tiempo, la salud de las personas en cada etapa de sus vidas.

El informe ¨Lancet Countdown 2019¨ pone de manifiesto que la el progreso actual es inadecuado, y a pesar de que las acciones son cada vez mayores, el calentamiento global esta ocurriendo más rápido de lo que los gobiernos pueden o están dispuestos a responder.

VÍDEO RELACIONADO: EL CAMBIO CLIMÁTICO PODRÍA ALTERAR EL SEXO DE LOS BEBÉS