Los expertos esperan una temporada de gripe «peor» este año
La escasa incidencia de la temporada de gripe la pasada campaña puede condicionar y provocar más contagios y gravedad de la enfermedad.
Pablo Ramos
La vacunación de la gripe de este 2021-2022 se ha iniciado ya en gran parte de España para reducir la incidencia de esta enfermedad. Y es que esta temporada los expertos esperan una gripe peor, más grave y con más casos que en 2020.
“El comportamiento de la gripe siempre es incierto. Los virus de la gripe que se han identificado hasta ahora son pocos y no permiten predecir si infectarán poco o mucho. Pero al no haber habido circulación de virus gripales en la temporada anterior, y por lo tanto tampoco inmunidad conferida por dicha circulación, cabe pensar que la población es más susceptible y la incidencia puede ser elevada”, explica a Eltiempo.es Ángela Domínguez, coordinadora del Grupo de Trabajo sobre Vacunaciones de la Sociedad Española de Epidemiología (SEE).
El aspecto fundamental que condicionará los registros de este año es que la temporada pasada de gripe apenas circularon los virus de la gripe, algo que podría explicarse en buena parte por las medidas de contención frente a la COVID-19.
«Todo hace pensar que la gripe de este año podría ser peor, más grave y con más casos que la de 2020»
Ángela Domínguez, de la SEE
“Este factor nos permitiría aventurar que la incidencia de la gripe puede ser importante porque la inmunidad de la población frente a la gripe debido a contactos previos con virus de la gripe en la temporada anterior es especialmente baja”, recuerda esta experta.
“En cualquier caso, las vacunas antigripales constituyen la forma más eficaz de prevenir los riesgos que supone la gripe para la salud de la población”, apunta.
Factores que determinan la incidencia de la gripe
En palabras de Domínguez, “la temporada de gripe de este año es imposible que sea mejor que el año pasado porque prácticamente no hubo gripe”. Por ejemplo, en esta temporada ya se ha empezado a detectar circulación de virus de la gripe, tanto de virus B como del subtipo H3N2 del virus A.
Sin embargo, no hay que olvidar que el comportamiento de la gripe en cada temporada es impredecible porque intervienen muchos factores tanto de los propios virus de la gripe, que van mutando continuamente, como de las experiencias previas que ha tenido la población con el virus y de la inmunidad conferida por la vacunación.
“En cualquier caso, las vacunas antigripales constituyen la forma más eficaz de prevenir los riesgos que supone la gripe para la salud de la población”, asevera Domínguez.
Medidas para prevenir la gripe
Además de la vacunación, otras medidas que pueden utilizarse para frenar la transmisión de los virus de la gripe y, por consiguiente, disminuir su incidencia son las denominadas medidas de higiene respiratoria. Entre ellas, el uso de mascarilla, cubrirse la nariz y boca con la parte anterior de codo al toser o estornudar, utilizar pañuelos desechables para sonarse, higiene de manos frecuente y siempre después de contactar con la nariz o la boca.
Todas estas estrategias reducen la probabilidad de que la gripe se propague. No obstante, hay que recordar que las personas con gripe deben abstenerse de ir al trabajo o a la escuela hasta que hayan transcurrido cerca de una semana desde que empezaron los síntomas, “el tiempo estimado en el que se eliminan los virus gripales que pueden ocasionar nuevos casos en personas susceptibles”, apunta esta experta.
Por su parte, la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica ya ha comenzado el seguimiento centinela de Infección Respiratoria Aguda en Atención Primaria (IRAs) y en Hospitales (IRAG) Gripe, COVID-19 y otros virus respiratorios. Unos informes que se publican de manera semanal y de acceso público.
En este primer informe de la temporada apunta que no se han notificado detecciones centinela de virus de la gripe procedentes de la vigilancia en Atención Primaria y tampoco detecciones del virus de la gripe no centinela.