La pequeña Suiza de África

Confiésalo, si piensas en África lo que te viene a la mente es calor, desiertos y selvas tropicales. Pero existe un lugar, a solo 68 kilómetros de Fez y en plena cordillera del Atlas considerado como “la Suiza de Marruecos”.

Creada por los franceses en 1930 como un destino vacacional, durante el invierno es el lugar preferido para esquiar por aquellos que pueden permitírselo. Se situa en el Atlas Medio a 1713 metros de altura y su clima es frío, por eso no es de extrañar, que además de la influencia francesa, su urbanismo sea de estilo centroeuropeo. Fue debido a su clima ideal que los franceses la consideraron un lugar ideal para los expatriados europeos, frescos veranos y nevados inviernos.

En sus inmediaciones se encuentra el Parque Nacional de Ifrane, representativo de la biodiversidad del Medio Atlas. Uno de los animales que antiguamente habitaba aquí era el león del Atlas, por lo que ha pasado a ser el emblema de la villa y se le dedica una estatua de piedra en el centro de la misma.

Tanto por sus parques como por los bosques que rodean el entorno de la ciudad, es muy común observar a atletas entrenando. No hay que olvidar que el atletismo de medio fondo es uno de los deportes nacionales y Marruecos ha dado grandes atletas en los últimos 25 años.

En los alrededores de Ifrane se ubican las dos únicas estaciones de esquí del Atlas medio, la de Michlifen  y la del Jbel Hebri, dos estaciones familiares y muy básicas. La primera de ella se sitúa en las laderas de un pequeño cono volcánico y rodeado de bosques de cedros.

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