La ola de calor eleva los niveles de contaminación

Los niveles de ozono emitidos a la atmósfera se han disparado durante estos días tras la ola de calor de junio.

ElTiempo.es

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Los niveles de ozono emitidos a la atmósfera se han disparado durante estos días tras la ola de calor de junio

No cabe duda que el calor ha sido la noticia de estas semanas, y no es para menos.  La ola de calor de junio ha sorprendido a todos. Temperaturas por encima de 40ºC en muchos puntos cuando aún no habíamos empezado el verano y récords que se batían en muchos observatorios.

Además, ha sido difícil conciliar el sueño. Las temperaturas mínimas se mantenían en prácticamente la mitad sur del país por encima de los 20ºC, a lo que conocemos como noches tropicales. Sentíamos estar más a finales de junio que a mediados de junio.

El calor y el sor, un riesgo

Pese a ello, la ola de calor y los episodios consecutivos de altas temperaturas, nos han dejado otros fenómenos asociados que también deberían haber sido noticia, sobre todo, porque se trata de un problema de salud pública.

Esta vez no hablamos de golpes de calor, o deshidratación, sino un problema de contaminación muy preocupante y que ha podido suponer un riesgo.

Los niveles de ozono disparados

La ciudad de Valladolid tuvo que cerrar el tráfico a todos los coches de los no residentes hasta el pasado lunes y se ha llegado a niveles peligrosos para la salud en algunas poblaciones de la Comunidad de Madrid, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura, el interior de Andalucía, Murcia, Valencia, Catalunya, las Islas Baleares y el Valle del Ebro, según algunos expertos.

La radiación solar tan fuerte de estos días ha disparado los niveles de ozono

En concreto, las estaciones de Puertollano (Ciudad Real), Córdoba, Jaén, Víznar (Granada), Bédar (Almería), Zarra (Valencia), Mallorca, Menorca e Ibiza, El Atazar y Orusco de Tajuña (Madrid) han superado varias veces los límites legales, mucho menos exigentes que los límites recomendados por la Organización Mundial de la Salud.

Varias estaciones de medición repartidas por el territorio español, apuntan que algunas localidades, sólo en la primavera, ya han sobrepasado el límite legal (establecido en 120 microgramos por metro cúbico de aire, medidos en periodos de ocho horas, que no debe superarse más de 25 días al año).

El ozono provoca 1.800 muertes prematuras al año en España

Un riesgo para la salud

El ozono troposférico (O3) es el contaminante que afecta a más población en Europa y a España.  Es uno de los gases que más preocupa a las autoridades europeas, ya que, según la Agencia Europea de Medio Ambiente, el ozono causa, sólo en España, unas 1800 muertes prematuras cada año.

La particularidad del ozono troposférico

A diferencia de otros contaminantes, como el dióxido de Nitrógeno o de Azufre, el ozono troposférico u “ozono malo” no sale directamente de los tubos de escape o de las chimeneas de las fábricas.

Se forma en las capas bajas de la atmósfera, prácticamente a nivel del suelo, por la reacción entre la luz solar, especialmente la ultravioleta y otros contaminantes precursores, derivados del tráfico, las grandes centrales termoeléctricas y algunas industrias.

Se forma en las zonas urbanas, pero se puede desplazar además hacia otros lugares, generalmente zonas suburbanas y rurales de la periferia. Allí tiene mayor incidencia, sobre todo en primavera y en verano.

Por el contrario, el ozono en las capas altas de la atmósfera es muy beneficioso, ya que absorbe parte de la radiación UV. No olvidemos la capa de ozono es uno de nuestros mayores escudos contra la radiación solar.