¿Hacer deporte con contaminación?

¿Es bueno hacer deporte en las ciudades los días de mucha contaminación ambiental?

Javier Vegas

Javier Vegas

Estos días en España estamos bajo la influencia de un potente anticiclón. En estos casos es común que en las grandes ciudades se pueda ver una gran boina negra, producida por los elementos contaminantes. De hecho, ciudades como Madrid o Barcelona han activado sus protocolos de alerta ante la contaminación atmosférica.

El sol, frío, falta de lluvias y ausencia de viento han hecho aumentar los niveles de dióxido de nitrógeno (NO ) y de otras partículas en suspensión en el aire. Según los expertos esta situación es perjudicial para la salud, sobre todo para personas mayores, asmáticos, gente con insuficiencia respiratoria o embarazadas. Además, hay que tener muy en cuenta a las personas que hacen deporte habitualmente al aire libre.

¿Es malo hacer deporte en las ciudades los días con altos niveles de contaminación?

El aire que respiramos está compuesto por un 20% de oxígeno y un 80% de otros gases (entre ellos los dañinos, cuando hay contaminación). Cuando hacemos ejercicio, el cuerpo requiere más oxígeno, y los pulmones necesitan filtrar más cantidad de aire por minuto. Los días de mucha contaminación, la acumulación de toxinas perjudiciales es mayor, por lo que el pulmón se ensucia más rápido.

Cuando hacemos deporte en esta situación también disminuirá nuestro rendimiento. El monóxido de carbono entra rápidamente a la sangre y ocupa el lugar del oxígeno en la molécula de hemoglobina, provocando que llegue menos oxígeno a los tejidos. Entre los efectos secundarios que nos puede producir a corto plazo están la sensación de ahogo, náuseas, rigidez en el pecho o irritación de los ojos.

A pesar de todo lo mencionado, los beneficios de la practica deportiva superan los riesgos asociados a inhalar más partículas contaminantes. En las ciudades donde a menudo hay altos niveles de contaminación, lo ideal es tomar una serie de precauciones:

Controlar los niveles de contaminación: Casi todas las ciudades ofrecen datos sobre contaminación ambiental. Intenta hacer deporte los días en que los niveles de contaminación no sean demasiado altos.

Planifica el ejercicio: Los días con alerta de calidad del aire haz entrenamientos menos intensos y más cortos. Evita las horas punta y la tarde, cuando los niveles son más altos. Madrugar y hacer deporte a primera hora de la mañana es la mejor opción.

Acude a parques y zonas verdes: Aunque en las grandes ciudades ningún lugar céntrico se salva de la contaminación, los niveles son más bajos en parques y zonas alejadas de los coches.

Consulta a tu médico: Si padeces asma, insuficiencia cardíaca o respiratoria es vital acudir al médico para que te asesore sobre qué tipo de actividad deportiva es la que más te conviene.

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