¿Ha llegado el frío para quedarse? Los termómetros irán recuperándose

El primer temporal del otoño llega antes del «veranillo de San Miguel».

Irene Santa

Irene Santa

VÍDEO: ASÍ EVOLUCIONARÁN LAS MÁXIMAS

Las temperaturas se han desplomado con una entrada de aire frío durante este fin de semana pero, a partir de la próxima semana semana los termómetros se irán recuperando progresivamente, coincidiendo con el «veranillo de San Miguel» de final de mes, aunque en esta ocasión no tendremos días cálidos, sino con valores normales para esta época del año, excepto en el interior sureste, donde sí podrían ser algo más altos.

¿Por qué bajaron tanto las temperaturas?

Ahora mismo la configuración atmosférica es ideal para que se produzca un episodio de frío en España: un potente anticiclón atlántico justo al oeste de la península y predominio de las bajas presiones sobre el continente europeo, con la borrasca Odette.

Situación sinóptica prevista para la tarde del sábado 26

Esta diferencia de presión entre ambas zonas genera un pasillo de viento del norte sobre España que es el responsable de arrastrar una mapa de aire de origen polar marítimo de desde latitudes más altas, produciéndose una descarga de aire muy frío sobre nuestro país.

Sin embargo, esta misma configuración también hará que en España haya una clara excepción, las Islas Canarias que quedan al margen de esta situación, aunque allí los termómetros bajarán el domingo.

¿Cómo de excepcional es la situación?

El sábado las temperaturas tenderán a recuperarse ligeramente en buena parte del país, sobre todo en el noroeste, con máximas algo más suaves, pero que aún así se quedarán en torno a unos 20 grados o incluso por debajo. En la costa sureste y en Baleares podrían bajar las máximas, pero aún así los valores serán allí más agradables.

Las temperaturas de estos días en la península y Baleares, tanto diurnas como nocturnas, están muy por debajo de lo normal para finales de septiembre según la climatología. Se ha tratado de un episodio de frío anómalo, ya que estas entradas de masas de aire polar son más propias de los últimos meses de año que de septiembre, un mes de transición entre el verano y el otoño.