Gota Fría, ¿tendremos este año?

Cada año por estas fechas de final de verano nos preguntamos: ¿será este un otoño de lluvias intensas producidas por la conocida Gota Fría? La respuesta te la damos a continuación.

Mario Picazo

Mario Picazo

  • Las DANAS son capaces de descargar cientos de litros de agua en menos de 24 horas
  • En agosto, el agua del Mediterráneo no estaba tan caliente como otros años

VÍDEO: ¿CÓMO SE ESPERA LA GOTA FRÍA ESTE AÑO?

Cada año en septiembre miramos al cielo con especial atención porque arranca uno de los periodos del año en los que la meteorología en España, y especialmente en el litoral Mediterráneo, se torna más extrema.

No hay fechas exactas, pero habitualmente desde mediados de septiembre hasta mediados de octubre, es más frecuente que se produzca ese fenómeno ya conocido por muchos y que popularmente se denomina ¨Gota Fría¨. Los meteorólogos, sobre todo estos últimos años, hemos optado por utilizar con más frecuencia un término más técnico, ¨DANA¨, o lo que es lo mismo Depresión Aislada en Niveles Altos de la atmósfera.

Riada en Adra, Almeria, 7 de septiembre de 2015.

¿Qué es la Gota Fría o DANAS?

Las DANAS son las encargadas de fabricar nubes de gran desarrollo vertical que a su vez descargan ingentes cantidades de agua sobre un mismo lugar en un espacio de tiempo relativamente corto. Para que eso ocurra, tiene que haber una borrasca en la superficie, a ser posible cerca de una fuente importante de vapor de agua.

Una situación clásica de DANA en nuestro Mediterráneo, es aquella en la que la borrasca se posiciona entre el litoral norte de Argelia y las costas del sudeste peninsular, aunque en otras ocasiones puede aparecer más al norte o incluso por ejemplo hacia el este en el Golfo de Cádiz.

Situación sinóptica en superficie y en altura a 500 mb de una DANA ubicada entre el norte de Argelia y el sudeste peninsular.

Para que esa borrasca situada sobre la superficie llegue a generar lluvias torrenciales, necesitamos que en niveles más altos de la atmósfera (entre uno 5000 y 8000 metros) sobre esa misma posición, el aire esté más frío de lo habitual.  Esa bolsa de aire frío aislado (de ahí el nombre DANA) ayuda y mucho a que el vapor de agua se condense rápidamente al ascender favoreciendo la rápida formación de nubes y liberando una gran cantidad de energía en la atmósfera.

Para potenciar aún más el efecto ascendente del aire húmedo, en España tenemos muchas montañas costeras, el conocido pre-litoral, contra ellas choca el aire húmedo del mar, favoreciendo aún más su ascenso y potenciando su efecto devastador.

Condiciones atmósfericas asociadas con una DANA para producir intensas tormentas.

A parte del aire frío en altura, y del aire cálido y húmedo en superficie, hace falta la presencia de un factor fundamental que contribuye y mucho a que haya vapor de agua en el aire, o por ponerlo de otra manera, gasolina para las nubes, la temperatura del agua del mar.

Cómo se encuentre de temperatura por estas fechas previas al otoño nuestro mar Mediterráneo, dice mucho de cómo podrían llegar las siguientes semanas en cuanto a la formación de tormentas intensas. Si se acaban formando, son capaces de descargar cientos de litros de agua en menos de 24 horas desde Andalucía, Ceuta o Melilla, pasando por Murcia y la Comunidad Valenciana, hasta Cataluña y Baleares.

Imagen del Meteosat mostrando una espectacular DANA sobre el sudeste de la península ibérica.

Previsión de la Gota Fría en 2016

Este año en agosto, el agua del Mediterráneo no estaba tan caliente como otros años por esas fechas. Pero los calores extremos de los primeros compases de septiembre han ayudado a recalentar algo la superficie del mar a lo largo del litoral Mediterráneo español. A día de hoy, el agua está 2 a 3oC por encima de la media habitual, y eso se traduce en vapor de agua potencial para formar grandes nubes si todos los ingredientes de inestabilidad coinciden en el mismo lugar.

Anomalía de la temperatura de la superficie del mar el 8 de septiembre de 2016

Sin embargo, mirando al Mediterráneo en conjunto, se aprecia que el agua está en general más caliente de lo habitual, aunque menos que otros años. Eso quiere decir, que durante las próximas semanas no debería haber tanto vapor de agua para alimentar posibles DANAS.

Además, hay que tener en cuenta, que el aporte de humedad para estas borrascas no solo llega de las costas más cercanas a la península o Baleares, sino que con frecuencia se transporta desde el Mediterráneo central (Córcega, Cerdeña, Sicilia), donde este año el mar no está tan cálido como por ejemplo en 2015.

Sabemos que hace falta agua y bastante en muchas zonas del este de España donde la sequía es extrema, pero cruzamos dedos para que no llegue de forma torrencial debido a la presencia de una DANA o similar.

Independiente de que este año el Mediterráneo en conjunto no tenga tanta temperatura, tanta energía potencial, sigue siendo una fuente de vapor de agua y la capacidad de ayudar a generar tormentas intensas sigue existiendo.