Fotos: las pistas de esquí teñidas por el polvo africano

Las estaciones de esquí se han teñido de marrón como consecuencia del polvo africano. Con este aspecto se ha quedado la nieve.

Javier Vegas

Javier Vegas

La nube de polvo africano que ha estado afectando a la Península en los últimos días, ha dejado estampas impresionantes. En ocasiones la calima ha ido acompañada de lluvia de barro, y cuando esta se produce en una superficie nevada, la nieve marrón es la protagonista. Estaciones de esquí como Sierra Nevada se han teñido de tonos oscuros, sin embargo, no es la única que lo ha sufrido.

El gran protagonista de esta semana, meteorológicamente hablando, ha sido sin duda el polvo en suspensión o calima procedente del desierto del Sahara. Aunque es un fenómeno muy habitual es las Islas Canarias por su cercanía a la costa africana, es mucho menos común en la Península.

Los vientos del sur procedentes del desierto del Sahara se fueron extendiendo por la Península de sur a norte. Ciudades como Sevilla o Málaga vieron los cielos teñirse de amarillo y rojo, y con el paso de las horas, la calima se extendió hasta el centro y este peninsular.

Sin embargo, lo que más llama la atención en estas situaciones es la lluvia de barro, también conocida como lluvia de sangre por sus tonos anaranjados o rojizos en superficie. Este fenómeno se produce cuando el vapor de agua en la atmósfera se une a las partículas de polvo y una vez en zonas altas de la atmósfera caen a la superficie en forma de barro.

Los coches no son los únicos que lo sufren, y es que en las estaciones de esquí el fenómeno es mucho más llamativo al contrastar los tonos marrones con el blanco de la nieve. Estas son algunas imágenes que ha dejado el polvo africano en las estaciones.