El nivel rojo por polen sigue extendiéndose por España
Trece provincias con niveles máximos de alergias. Las temperaturas suaves favorecen la polinización.
Eltiempo.es IA
El nivel máximo de polen continúa extendiéndose por toda la península. Esta semana ya son 13 provincias en nivel rojo y 11 en nivel amarillo por polinización, según informa la Sección de Polen de eltiempo.es.
Esta semana se suma una provincia más al nivel rojo por polinización. Así, las zonas afectadas por este nivel serían: Vizcaya, Guipúzcoa, Segovia, Madrid, Guadalajara, Zaragoza, Girona, Barcelona, Tarragona, Córdoba, Jaén, Granada y Málaga.
Por el contrario, las provincias con presencia moderada de polen han disminuido a 11 frente a las 16 de la semana pasada. Las provincias en nivel amarillo son: Palencia, Burgos, Álava, Soria, Huesca, Lérida, Ávila, Toledo, Albacete, Murcia y Cádiz.
¿Cuál es la especie más polinizadora esta semana?
Como ha ocurrido en las últimas semanas, el ciprés se alza con el puesto de la especie más polinizadora. Esta semana ha dejado en jaque a los alérgicos de 7 provincias con nivel rojo y a 17 en nivel amarillo.
El ‘efecto Filomena’ intensificará las alergias esta primavera, sobre todo de la gramínea salvaje
En segundo lugar, y al contrario que semanas anteriores, el segundo puesto es para la ortiga que ha dejado nivel rojo en 3 provincias y amarillo en otras 2.
En último lugar se encuentra la familia de los alisos con 2 provincias en nivel rojo por polen.
¿Cómo serán las alergias de esta primavera?
La primavera de 2021 se espera que sea intensa para los alérgicos. El ‘efecto Filomena’ también podría repercutir seriamente en los alérgicos. Un invierno inestable, con fuertes nevadas y húmedo, seguido de temperaturas más suaves propias de la primavera puede provocar una mayor polinización de las plantas que causan más alergias. Sobre todo la de las gramíneas salvajes.
[destacado name=»Destacado Polen»]Sin embargo, estos pronósticos pueden variar en función de las condiciones meteorológicas de las últimas semanas del invierno. Si las lluvias son constantes, a pesar de fomentar la floración, también limpiarían la atmósfera de alérgenos. Por el contrario, si las próximas semanas son muy calurosas pueden “quemar las gramíneas” y reducir su polinización.