Conversión de CO2 en combustible
Dos grandes proyectos están en marcha para conseguir reducir la cantidad de dióxido de carbono en la atmósfera y convertirlo en combustible.
Eltiempo.es IA
Las aspiraciones por reducir el dióxido de carbono (CO2) de la atmósfera y convertirlo en combustible empiezan a ver la luz. Varios proyectos están en marcha para conseguir este objetivo y desde eltiempo.es queremos contaros las ambiciones de dos de ellos.
Material que transforma CO2 en combustible
Un nuevo material que no solo captura el dióxido de carbono, el principal gas de efecto invernadero, sino que también lo convierte en combustible. Así es el tetrámero de cobre, descubierto recientemente por el Departamento de Energía de Estados Unidos. Un material que podría revolucionar la lucha contra la contaminación atmosférica y mejorar la técnica de conversión de dióxido de carbono en combustible.
El nuevo compuesto está formado por pequeños grupos de cuatro átomos de cobre, unidos por una capa fina de óxido de aluminio. Los tetrámetros de cobre se unen al CO2 y ayudan a acelerar su conversión en metanol, que puede ser almacenado o quemado en forma de combustible.
Una posible aplicación de este sistema sería su instalación dentro de una chimenea con el fin de capturar los gases de efecto invernadero antes de ser liberados a la atmósfera.
Hasta ahora los científicos han conseguido fabricar apenas pequeñas cantidades de este material, cuya durabilidad a largo plazo todavía es incierta:
Existe la posibilidad de que los tetrámetros de cobre se descompongan cuando se coloquen en un ambiente industrial. Por eso, garantizar su durabilidad es un paso crítico para el futuro de la investigación,
explica Larry Curtiss, investigador del Departamento de Energía americano que participó en el estudio.
Sistema que absorbe el CO2 de la atmósfera y lo transforma en combustible
Un grupo de investigadores canadienses ha logrado crear un sistema que convierte CO2 en combustible. Esta planta de reciclaje combinará dióxido de carbono con división de hidrógeno a partir de agua para formar combustible de hidrocarburo. Lo que se plantea con esto es proporcionar la tecnología para poder producir en un futuro combustible ecológico.
En estos momentos, el proyecto está pensado para capturar solo alrededor de 450 toneladas de CO2 al año, una cifra que apenas cubriría las emisiones de carbono de unos 33 canadienses. No obstante, los creadores aseguran que con el tiempo esta cantidad podría llegar a aumentar unas 20.000 veces. En la actualidad, automóviles, camiones y aviones constituyen aproximadamente el 60% de las emisiones de CO2. Según explican los expertos, el único método para absorber este gas sería a través de captura de aire directo.
Este sistema requiere 1.000 veces menos espacio que los árboles para succionarlo y se puede instalar en la tierra, por ejemplo en las llanuras desérticas en las que no merece la pena cultivar.