Consejos para cuidar tus prendas de lana

¿Cómo lavarlas? ¿Qué hacer para evitar que salgan bolas? Lee nuestros consejos.

Marian

Marian

No hay nada como una buena prenda de lana para abrigarse en invierno. Aunque las temperaturas bajen y fuera ya tiriten hasta las farolas, tú vas a salvo bajo tu jersey de ochos favorito (o de cuatros, eso ya va al gusto). El problema está en que no te atreves a lavarlo. Ni a plancharlo. Ni a rozarlo siquiera, por miedo a que se convierta todo él en una bola gigante de lana. ¿Cómo cuidar entonces estas prendas? En eltiempo.es te damos algunos consejos.

  • Lee la etiqueta que llevan. Esos trozos kilométricos de material cortante que ponen los fabricantes a la ropa no están ahí para generarte urticaria (que también), sino para informarte sobre cómo tratarla. Lleva siempre contigo esta chuleta y deja que tu jersey te hable. ¿En la etiqueta sale una mano en un cubo de agua? Te está diciendo que debes lavarlo a mano. O que acaricies el cubo, no sé.

Fuente: http://www.hogarutil.com/

  • Para aquellas prendas que permiten el lavado a máquina, procura que éste sea lo menos agresivo posible. Alguno de los botones de tu lavadora sirve para poner un ciclo corto, y otro para suavizar el centrifugado. Localízalos (a lo mejor tienes que leerte el manual de instrucciones o llamar a tu madre), y púlsalos. Seguramente habrá también una ruleta con temperaturas, sitúala para que el lavado sea con agua fría (fría aquí es 30ºC o menos). Esto último es muy importante si no quieres enseñar el ombligo la próxima vez que te pongas el jersey.
  • Ya te dimos algunos consejos para tender la ropa, pero no está de más recordarlo. Para que no se deformen las prendas de lana, lo mejor es extenderlas horizontalmente sobre una toalla para que se sequen. Si cuelgas el jersey, es probable que luego te sirva de vestido de noche.
  • No utilices secadora. Es una máquina diseñada por el demonio y especializada en destruir ropa delicada.

Fuente: http://www.elizamagrin.com.br/

  • Nunca planches tus prendas de lana en seco, utiliza vapor para evitar que se endurezcan y se quemen. Hazlo siempre con la temperatura moderada, y mejor si es con un paño húmedo sobre la prenda para no poner la plancha directamente sobre ella. No te despistes, o crearás un estampado de lo más curioso en tu jersey liso.
  • Para recuperar la suavidad de esa prenda de lana que parece un estropajo, ponla en remojo en agua en la que hayas cocido judías blancas; el almidón devolverá el tacto suave a tu ropa. Si no te has acordado de sacar las judías antes, ahora además de un jersey mullido tendrás un guiso de lo más sabroso.
  • Si esa prenda de lana que te has comprado pica y tienes la piel en carne viva de rascarte, prueba a dejarlo un rato con agua y acondicionador de pelo. El resultado será un jersey suave y con aroma a frutos del bosque.
  • Para evitar las odiadas bolas en los jerseys y chaquetas de lana, la sabiduría popular habla de meterlo en el congelador durante 24 horas para atrasar su aparición. Cuando salgan, puedes optar por pasarle una cuchilla o un quitapelusas. Esto solucionará el problema, aunque sólo momentáneamente, pues al cabo del tiempo tendrás que repetir la operación. Transcurridos unos meses, tu jersey habrá desaparecido de tanto raspar. Pero las bolas también. Era lo que querías, ¿no?

Fuente: http://tejealmu.blogspot.com