Consejos para correr con frío
Respirar por la nariz, comprar ropa transpirable o hidratarse bien son solo algunas de las recomendaciones para correr cuando hace frío
Javier Vegas
Salir a correr es un deporte apto para todas las estaciones del año, incluido el invierno, aunque nos parezca que las temperaturas no son las más indicadas. Eso no quiere decir que no tengamos que prepararnos con conciencia para entrenar y correr durante los meses más fríos del año.
Por eso, es necesario tener en cuenta una serie consejos para correr con frío. Si se tienen en cuenta y se adaptan a la rutina de entrenamiento, te harán disfrutar igual o más de este deporte.
¿Cómo salir a correr si hace frío?
El método e indicaciones para salir a correr variará dependiendo de la estación el año. Durante el otoño y el invierno, estaciones que registran las temperaturas más frescas y un mayor número de precipitaciones, habrá que prestar especial atención, por ejemplo, a la ropa. Este es quizás, uno de los consejos más importantes para correr con frío.
Por el contrario, correr durante el verano y días muy calurosos requiere otra serie de consejos. Durante este periodo, será fundamental tener en cuenta la hora a la que salimos y, por supuesto, la hidratación y alimentación del deportista o aficionado.
¿Cuál es la temperatura mínima para correr?
Se han hecho diversos estudios sobre maratones para calcular cuál es la mejor temperatura mínima para salir a correr. Dependiendo del sexo, varía. Los datos apuntan a que la temperatura mínima ideal para hombres es 6,2ºC. Por su parte, para las mujeres la temperatura óptima para correr de 9,9ºC.
También, hay que tener en cuenta que, cuando uno lleva un rato corriendo y ha entrado en calor, su percepción será unos 10ºC mayor que la temperatura externa. Por lo tanto, si se sale a correr con una temperatura de 8ºC, la sensación corporal al rato de hacer deporte será de estar a unos 18ºC.
¿Cómo adaptarse rápido al frío?
La mejor manera de adaptarse rápido al frío a la hora de correr es hacer un correcto estiramiento y un precalentamiento eficaz. Si se hace de la manera óptima, nos proporcionará cierto aumento de temperatura corporal previo a empezar a correr, y así el rato que hagamos kilómetros no serán tan desagradable.
Cómo entrenar en invierno
1 – Intenta motivarte
No siempre apetece hacer deporte, y menos si hay que hacerlo en el exterior con condiciones que no invitan a ello. Una buena idea es salir con más gente. Así, uno evitará aburrirse.
2 – Calienta bien
Con el frío somos más propensos a lesionarnos. Especialmente si no se realiza un buen calentamiento. Calentar previamente a la sesión de running permite aumentar progresivamente la temperatura corporal y el calor muscular. Como consecuencia, tendremos mayor flexibilidad en las articulaciones.
3- Utiliza prendas térmicas
Dotan al deportista de una gran ligereza y comodidad para poder realizar ejercicio sin molestias. Las camisetas térmicas tienen un peso muy reducido y suelen estar fabricadas de poliéster.
Estas prendas nos ayudan a mantenernos con una buena ventilación y esto regula de forma eficiente la temperatura del cuerpo. No es aconsejable vestirnos con ropas gruesas, ya que favorecerá la humedad con el sudor.
Además, intenta llevar ropa oscura, ya que absorbe mejor los rayos solares.
4 – Mantén los pies calientes
El frío nos entra por los pies, por lo que debemos asegurarnos de llevar zapatillas impermeables. También existen calcetines para el invierno que mantienen el calor en los pies.
5 – Hidrátate bien
El aire frío nos reseca la garganta con facilidad y acelera la deshidratación. Es bueno beber pequeñas cantidades de agua durante y después de la actividad física.
6 – Llévate algo para comer
Si vas a correr un buen rato es bueno que tengamos a mano algo para nutrirnos, como frutos secos o barritas energéticas.
7 – No corras al límite
Cuando el frío es extremo lo mejor es que no busquemos lograr marcas personales. Es mejor dejarlas para cuando las condiciones meteorológicas sean más favorables. Intenta correr lo justo y sin forzar.
8. Una ducha después
La temperatura corporal comienza a disminuir en cuanto paramos de correr. Por lo tanto, nos cambiaremos de ropa lo antes posible para evitar un resfriado. Darse una ducha y tomar algo caliente es una gran opción.