Cómo cuidar tus plantas en otoño

Tus plantas no tienen por qué morir en otoño. Puedes evitarlo siguiendo estos consejos.

Marian

Marian

Recientemente has descubierto que aquella planta tan lozana y colorida que un día te regalaron, y de la cual te sentías tremendamente orgulloso por lo bien cuidada que estaba, era en realidad de plástico Made in China. Eso te ha generado un trauma, por supuesto, y es que han sido muchas horas de mimos y dedicación las que le has dedicado. Todos aquellos grandes éxitos de la Canción Española que le cantaste habían caído en saco roto. Y es por ello por lo que te has decidido a adquirir un par de plantas de las de verdad, de esas que, nada más pagar, ya sabes que estás firmando su sentencia de muerte. En eltiempo.es no queremos que sufras más traumas, así que te damos algunos consejos para que sepas cuidar de tus pequeños seres vivos durante este otoño:

  • Abónalas. No a Canal+, sino con un abono orgánico. Esto no lo tendrás que volver a hacer hasta después del invierno. Para entonces tus plantas ya se habrán dado cuenta de lo buen jardinero que eres y habrán huido a México.
  • Sitúalas cerca de la ventana para que aprovechen las pocas horas de luz de esta época del año. Da la vuelta a las macetas de vez en cuando, así la luz llegará a toda la planta de manera uniforme. Seguramente te acuerdes de este punto cuando veas que tu planta se ha convertido en el Dr. Jekyll y Mr. Hyde.
  • No las riegues demasiado. De hecho, en otoño hay que ir disminuyendo la frecuencia de riego progresivamente, y no poner agua en el plato de debajo, para ir aclimatándolas al invierno. Sé que esto es lo más divertido de tener plantas, pero si las riegas las catorce veces al día que habías planeado, las vas a ahogar. No sé, para entretenerte, puedes cantarles o probar a enseñarles el sit y el plas.
  • Agrupa las plantas, sobre todo cuando pongas la calefacción. Se generará un microclima a su alrededor y ayudará a mantener la humedad ambiente. Esto conlleva riesgos, claro, porque se organizarán y acabarán amotinándose para exigir libertad (o para exigir que hagas, al menos, un curso de jardinería amateur).