Día de la Salud: Así te afectan los cambios de tiempo a tu salud

El cambio en las temperaturas, en la presión atmosférica o la exposición a la contaminación puede afectar a nuestra salud.

Eltiempo.es IA

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Cada 7 de abril se celebra el Día Internacional de la Salud, una fecha especialmente representativa este 2023 ya que la Organización Mundial de la Salud (OMS) celebra su 75º Aniversario y quiere aprovechar esta efeméride para recordar los éxitos de la salud pública que han mejorado la calidad de vida de los seres humanos durante las últimas siete décadas.

Desde Eltiempo.es, queremos dedicar este Día Mundial de la Salud a un tema que consideramos de suma importancia y que vincula una de nuestras áreas de competencia, la meteorología, con la salud. Hablamos de la meteorosensibilidad.

Un término que significa, tal y como define Mar Gómez, doctora en Físicas y Responsable de Meteorología de Eltiempo.es, en su libro «Meteorosensibles» como “sensibilidad al tiempo atmosférico«. Se trata de un concepto muy reciente, ya que fue acuñado por primera vez en 1938.

«De la misma manera que el tiempo meteorológico es como el estado de ánimo, el clima sería como nuestra personalidad, construida de manera más robusta a lo largo de los años y que se va moldeando a través de las diferentes situaciones que vivimos, entre otras cosas», comenta Mar.

¿Qué quiere decir esto? Que los humanos, en mayor o menor medida, somos sensibles a los cambios del tiempo en nuestro día a día, y nuestra forma de ser está moldeada por el clima de la zona en la que vivimos. Esto nos afectará más o menos según cuánto de meteorosensibles seamos.

¿Cómo saber si soy meteorosensible?

Tal y como apunta, Mar Gómez en su libro, las personas meteorosensibles son las que tienen una cierta sensibilidad a los cambios en algunas variables meteorológicas como la humedad, la temperatura, la presión atmosférica o el viento. Estos cambios pueden dar lugar a la aparición de dolencias físicas y estados psicopatológicos.

Se estima que entre un 30 y un 60 % por ciento de la población es meteorosensible, algo que afecta especialmente a las mujeres (sobre todo durante la menstruación y la menopausia) y a las personas de edad avanzada.

Factores que influyen si eres meteorosensible

1 – La presión

las variaciones de presión atmosférica (aumentos o descensos), la humedad relativa o la temperatura podrían influir en la percepción de los síntomas de la artritis. En cuanto a las migrañas, los cambios en la presión atmosférica podrían inducir o agravar este tipo de trastorno neurológico.

En cuanto a nuestra salud mental, se han encontrado vínculos entre la presión barométrica y los ingresos hospitalarios internos por manías y alteraciones en el estado de ánimo.

2 – El viento

«Algunos tipos de viento, debido a la ionización positiva de las masas de aire que transportan, pueden producir efectos en nuestro cuerpo y agravar ciertos aspectos de la salud mental, como transtornos afectivos estacionales o, incluso, incrementar el riesgo de suicidio.

3 – El calor

El calor puede producir efectos graves en nuestra salud, y esto se puede manifestar como calambres, agotamiento, insolación o hipertermia. También se produce estrés térmico, deshidratación o un empeoramiento de enfermedades cardiovasculares, respiratorias, renales o trastornos electrolíticos.

En la salud mental, también puede agravar la irritabilidad, la agresividad y cambios en el estado de ánimo. Varios estudios demuestran que la criminalidad aumenta en episodios de olas de calor.

4 – La contaminación

La OMS estima que alrededor del 90 % de las personas del mundo respiran aire contaminado. Y otra cifra: En un año, la contaminación del aire es responsable de 4,2 millones de fallecimientos en todo el mundo.

Los investigadores han descubierto que los altos niveles de contaminación del aire pueden dañar las capacidades cognitivas de los niños, aumentar el riesgo de deterioro cognitivo en los adultos, producir más agresividad y posiblemente incluso contribuir a la depresión.

5 – El sol

La exposición a la luz solar representa más del 90 % de las necesidades de vitamina D de la mayoría de las personas. La luz solar puede proporcionar un efecto protector significativo para la osteoporosis, las enfermedades cardiovasculares, respiratorias, inflamatorias y la diabetes.

La serotonina, por su lado, regula las emociones, el sueño, el apetito, el ritmo cardíaco, la temperatura corporal o el apetito sexual.

6 – La luna

«No hay evidencias concluyentes que demuestren que existe una relación entre el ciclo lunar y el ciclo menstrual ni con la frecuencia de los partos. Tampoco hay evidencias de que los ciclos de nuestro satélite puedan influir en nuestro bienestar mental.

7 – Los cambios de estación

Afortunadamente, la mayoría de la gente no alcanzará un nivel «diagnosticable» de trastorno afectivo estacional (TAE), un trastorno del estado de ánimo relacionado con el cambio de las estaciones, pero hay cambios definitivos que ocurren en otoño que pueden afectar nuestra energía, estado de ánimo, metabolismo y sueño.

Consejos para mejorar el estado de ánimo si eres meteorosensible

1 – Sal fuera. Los estudios demuestran que solo unos pocos minutos caminando con aire fresco pueden levantar el ánimo y el estado de ánimo. Un estudio publicado en el Journal of Consumer Psychology reveló que las personas se sentían más positivas con la luz al aire libre.

2 – Organiza algunas actividades al aire libre. Incluso cuando hace frío y llueve, todavía tendrás cierta exposición a los rayos UV, que pueden ayudarte a mejorar tu estado de ánimo y regular el ritmo  de tu cuerpo.

3 – Haz deporte: Una investigación del British Journal of Sports Medicine revela que solo 20 minutos de actividad física pueden mejorar el estado de ánimo.

4 – Deshazte del desorden. El caos visual puede parecer inofensivo, pero el desorden, la desorganización, son estresantes y desaniman a la gente. Los estudios demuestran que cuando las personas se encuentran en entornos estéticamente agradables, organizados y despejados, se sienten más relajados y contentos.

5 – Sé positivo. Céntrate en lo que está yendo bien. Ponte propósitos alcanzables y valora lo que tienes, explora tu positividad y fomenta el optimismo.