¿Cómo afecta el cambio climático a las playas de España?

La cuenca mediterránea, una de las áreas más vulnerables al cambio climático. ¡No te pierdas este estudio!

Meteoclim

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El cambio climático tendrá consecuencias fatales en el sector turístico de nuestro país

A día de hoy, podemos decir con toda certeza que la Tierra a lo largo del último siglo y con previsiones para los próximos años, está experimentando y experimentará un aumento notable de la temperatura. Este hecho hace del cambio climático una de las principales amenazas para los sectores que dependen del clima, entre los que destaca el sector turístico.

El clima y la meteorología han sido, son y serán factores muy relevantes para el desarrollo económico de los países del mediterráneo, sobretodo en España, dónde la actividad turística conlleva una buena parte de los ingresos. Esta interdependencia del tiempo implica, que cualquier cambio en las condiciones climáticas podría suponer impactos muy significativos.

Potencial climático para la explotación turística

El clima de un enclave determina fuertemente su valor como recurso turístico, especialmente en los grandes destinos mediterráneos dedicados a la explotación del modelo turístico de masas de sol y playa.

Ante ello, se han desarrollado en las últimas décadas, algunos índices climáticos que nos ha permitido caracterizar cuantitativamente el potencial de un destino, desde una perspectiva climática, en el mercado mediterráneo y europeo actual, así como explorar su posible evolución a lo largo de las próximas décadas en una era de cambio climático.

La cuenca mediterránea no es solamente una de los destinos turísticos más visitados del mundo, sino también, según el panel de expertos nombrado por las Naciones Unidas, una de las áreas más vulnerables al impacto del cambio climático.

Por ello, es necesario que los países que tienen un desarrollado sector turístico realicen planes, estrategias y estudios, para prever y actuar enfrente a los posibles cambios climáticos.

La estrecha relación entre las condiciones atmosféricas y el disfrute de una actividad turística al aire libre debe ser caracterizada y cuantificada de manera que la satisfacción de un turista pueda ser parametrizada, obteniendo así datos que nos servirán de cara a la planificación regional.

En base a este sistema en el que se caracteriza la relación entre el tiempo y la idoneidad para la realización de actividades turísticas: náutica, golf, senderismo, fútbol, turismo cultural y cicloturismo, (que iremos explicando en próximos post), podemos obtener valores que nos indiquen si están cambiando o cambiarán las áreas favorables al desarrollo de dichas actividades.

Como bien sabemos desde la década de 1960, la principal actividad económica en la cuenca Mediterránea española está fuertemente orientada al turismo de masas de sol y playa, el cual presenta una fuerte estacionalidad.

Sin embargo, algunos estudios han señalado que este mercado ya está experimentando cambios notorios, debido a las inclemencias y variaciones del clima.

Tras aplicar algunos de los índices de satisfacción para cada día, actividad y situación geográfica, en los que se tienen en cuenta distintas variables meteorológicas como la precipitación, la temperatura o la nubosidad, se obtienen un conjunto de datos que agrupamos en tres categorías:

  • Inaceptables (los practicantes de esa actividad consideran inadecuadas las condiciones atmosféricas del día para la práctica de esa actividad)
  • Aceptables (las condiciones del día son suficientes para la práctica)
  • Ideales (las condiciones favorecen un disfrute máximo de la modalidad turística)

Observando esta imagen podemos ver cómo los valores más altos se dibujan en la cuenca mediterránea, lo que denota la evidente relevancia que tiene el factor climático en la explotación de este modelo.

Las regiones Mediterráneas cuentan con el mayor número de días aceptables de Sol y Playa, con entre 5 a 7 meses al año en la ribera norte, y hasta 10 meses en puntos de la ribera sur, especialmente en el Mediterráneo Oriental.

Ahora bien, si tomamos como base las frecuencias de días ideales que ofrece el clima actual (1990-2009) y calculamos las diferencias que obtenemos a partir de las proyecciones climáticas a lo largo del S. XXI, obtenemos que:

  • Se observa un aumento progresivo generalizado en la frecuencia anual de días ideales. +30 días a finales de siglo en gran parte de la costa Mediterránea.
  • Los aumentos son mucho más suaves en el norte de Europa, con valores de entre 10-15 días mayores que en la actualidad.
  • Se obtienen incrementos para finales del siglo de entre un 20 y un 40% de días ideales de Sol y Playa en gran parte del Mediterráneo, incluyendo la costa española.
  • En cuanto a los notables incrementos relativos que se obtienen en las Islas Británicas y mares del Norte y Báltico, éstos no tienen ninguna implicación significativa al representar un incremento absoluto despreciable (menor que 10 días).

Ahora bien, en el Mediterráneo también podemos apreciar una disminución generalizada para los veranos de finales de siglo en el número medio de días ideales de Sol y Playa, causada principalmente por un aumento de las temperaturas que afecta negativamente al bienestar y satisfacción, lo que es compensado por aumentos de entre 10 y 40 días en las estaciones de invierno, primavera y otoño.

De manera que, a pesar de experimentar un descenso de frecuencias en verano, se prevé un aumento en las frecuencias anuales.

Conclusiones

Las proyecciones del potencial climático para el siglo XXI muestran dos aspectos relevantes:

  • Una reducción generalizada en la cuenca Mediterránea española de las condiciones ideales para el disfrute de las modalidades turísticas consideradas durante los meses de verano, debido al aumento de la sensación térmica, compensado en general por un aumento del potencial climático en las estaciones de transición (otoño y primavera).
  • Con el aumento de las temperaturas aparecerán nuevas regiones del globo, que podrán competir con los sectores turísticos consolidados. Destinos de latitudes y altitudes más elevadas los que podrían verse más beneficiados.

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