¿Cómo actúa la crema solar?

Llega el calor y el verano y todo el mundo quiere lucir un buen bronceado. Sin embargo ¿sabéis cómo funcionan las cremas solares?

Mar Gómez

Mar Gómez

Llega el calor y el verano y todo el mundo quiere lucir un buen bronceado. Sin embargo ¿somos conscientes de los peligros que entraña tomar el sol sin protección o con una crema solar inadecuada para nuestra piel? Todos los dermatólogos recomiendan ponernos repetidas veces crema de protección solar. Os contamos cómo esta crema protege nuestra piel y qué es exactamente el factor de protección solar.

En primer lugar hay que mencionar que el sol emite energía continuamente debido a varios tipos de radiaciones. Entre ellas están los rayos X, las ondas de radio, las radiaciones infrarrojas y la radiación ultravioleta. Esta se divide a su vez en tres tipos: UVA, UVB y UVC. Estas últimas son absorbidas por la capa de ozono, por lo que no debemos preocuparnos demasiado, pero las otras dos sí que llegan hasta nosotros, sobre todo la B.

Los rayos UVA penetran hasta la dermis por lo que son los responsables del bronceado y también debido a que deterioran la elastina y el colágeno aceleran el proceso de envejecimiento cutáneo.

Los rayos UVB provocan las quemaduras y aumentan el riesgo de poder sufrir un cáncer a largo plazo, por lo que son los más peligrosos. Por ello es necesaria una doble protección contra los UVA y UVB.

Las cremas solares contienen una serie de sustancias químicas cuya función es absorber las radiaciones ultravioleta. Según su capacidad de absorción, reciben una puntuación FPS (Factor de Protección solar) más alta o menor.

¿Qué significa el FPS 30,50,60…?

Como mencionamos anteriomente, FPS son las siglas de Factor de Protección Solar y el número indica la cantidad de radiación solar necesaria para que esta nos pueda causar daño en la piel con la crema una vez aplicada.

Pongamos un ejemplo: consideremos una persona blanca que normalmente tarde diez minutos en quemarse. Si usa un factor de protección 15 tardará 150 minutos en quemarse. Si usamos protección 50 entonces tendríamos 500 minutos expuestos al sol y protegidos de la radiación.

Estos números en el protector solar nos indican el tiempo que aguantaremos sin que la radiación penetre en nuestra piel, multiplicando el tiempo que nuestra piel aguanta normalmente. Además dependerá del tipo de piel que tengamos y del número de la crema de protección solar.

No obstante, los expertos recomiendan evitar la exposición prolongada al sol más de veinte minutos y en las horas centrales del día y no hay que olvidar renovar la protección a lo largo del día.