Así influye el coronavirus en la calidad y gestión del agua

Pablo Ramos

Pablo Ramos

El agua corriente es un básico para mantener una higiene adecuada y una de las primeras barreras de contención de la pandemia.

La pandemia provocada por el coronavirus ha supuesto un reto para todos los sectores de la sociedad. Y uno de los que más ha puesto de manifiesto su necesidad es el control, calidad y gestión del agua que llega cada día a nuestras casas ya que el agua se ha convertido en una de las primeras barreras de contención del virus para higienizar las manos, la ropa y todos los elementos del hogar.

Pero ¿cómo ha influido el coronavirus en la calidad y la gestión del agua?

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En palabras de Luis Babiano, gerente a la Asociación Española de Operadores Públicos de Abastecimiento y Saneamiento (AEOPAS) la pandemia ha sido un reto. “La operatividad de la red ha funcionado bastante bien pero también ha tenido una consecuencia social muy alta. El agua es un derecho humano y aparte con la pandemia se ha evidenciado que tener agua ha sido casi la prevacuna”, recalca Babiano.

Tener acceso a un agua de calidad es un factor determinante para tener una higiene adecuad

De hecho, gran parte de las medidas de control y contención del coronavirus se basan en una escrupulosa higiene tanto de manos y corporal, como de ropa y otros elementos del hogar, en la que el agua es el elemento principal. Tanto es así que desde el primer momento de la pandemia el sector de abastecimiento y saneamiento de agua se consideró un servicio prioritario y de interés. “Tener acceso a un agua de calidad es un factor determinante para tener una higiene adecuada en nuestros hogares y la situación se ha llevado bastante bien por parte de los profesionales”, apunta este experto.

Sector esencial

Así, los profesionales de este sector han estado realizando funciones ordinarias independientemente de la situación de la pandemia. “Nosotros hemos extendido nuestros criterios sociales a la población tanto a colectivos desfavorecidos, industria autónomos para ofrecer una visión de rescate al ciudadano y rescate de nuestro tejido empresarial”, detalla el gerente.

El aumento de uso de las toallitas ha provocado atascos en las tuberías internas de las comunidades

Asimismo, el control y análisis de las aguas grises se ha convertido en una herramienta más al servicio de la detección de brotes en pueblos y ciudades ya que los rastros que puede dejar el coronavirus son identificables en las aguas residuales. “Estamos colaborando en la investigación de la pandemia”, detalla este experto.

Opciones de mejora

No obstante, a pesar del buen funcionamiento general de la red en España, este sector también ha tenido que soportar falsas informaciones que llegaron a circular sobre la mala calidad del agua y que ocasionaron traslados innecesarios de personas al supermercado para comprar agua en pleno confinamiento estricto.

“Además, el aumento de uso de las toallitas ha provocado atascos en las tuberías internas de las comunidades y otras veces en determinados puntos de la red de agua y saneamiento por lo que teníamos que mandar operarios, lo que ha incrementado el número de incidencias en los primeros momentos de la pandemia”, asevera Babiano.

Del mismo modo, la situación ha puesto de manifiesto algunas fragilidades del sector. De hecho, según los expertos, hace falta un reforzamiento ante el desequilibrio económico generado por la pandemia, una legislación adecuada y una inversión en zonas rurales. «Los gobiernos europeos tendrían defender abiertamente los valores de lo público, impulsar su reforma y aceptar un papel más activo en la economía», reclama.

Una higiene adecuada ayudará aún más a prevenir la transmisión de persona a persona de COVID-19

En este sentido, desde Aeopas apelan al consenso y consideran es ineludible que el gobierno impulse un gran Pacto social por el Agua basado en la aplicación del derecho humano al agua, la financiación de nuevas infraestructuras que garanticen respuestas exitosas frente a un escenario de cambio climático, la innovación y digitalización y mayor regulación de ciclo integral urbano del agua. «El futuro de nuestros pueblos y ciudades dependerá de este pacto«, detalla el gerente de la entidad.

Medidas de prevención

Es más, en un documento elaborado por la Organización Mundial de la Salud, el suministro de agua potable, saneamiento y condiciones higiénicas juega “un papel esencial en la protección de la salud humana durante todos los brotes de enfermedades infecciosas, incluido el brote actual de COVID-19.

“Las buenas y consistentemente aplicadas prácticas de gestión de residuos y agua, saneamiento e higiene, en comunidades, hogares, escuelas, mercados e instalaciones de atención médica ayudarán aún más a prevenir la transmisión de persona a persona de COVID-19”, detalla este documento.