Alicante se prepara ya así para largos periodos de sequía

Javier Vegas

Javier Vegas

Se ha construido un parque que almacena y recicla el agua de lluvia.

Los que conozcan el clima de Alicante sabrán que las lluvias no son frecuentes, sin embargo cuando llueve lo puede hacer de forma torrencial con inundaciones.

En San Juan, una zona baja de la ciudad, las autoridades han construido un nuevo parque conocido como La Marjal con el propósito principal de almacenar agua de lluvia.

Su funcionamiento se asemeja al de un aljibe , una técnica desarrollada por los residentes árabes en España hace muchos siglos, en la que el agua de lluvia se recoge y almacena en una especie de cisterna debajo de un edificio. La Marjal hace un trabajo similar, pero al aire libre. El agua también se desvía a una planta de tratamiento cercana, donde posteriormente se puede utilizar para limpiar calles y parques acuáticos.

«La necesidad de una gestión sostenible nos ha obligado a recuperar las prácticas ancestrales», dice Jorge Olcina, profesor de geografía analítica en la Universidad de Alicante. «Se podría decir que estas instalaciones de almacenamiento de agua de lluvia en Alicante y Barcelona son las nuevas aljibes del siglo XXI«.

Fotografía: Aguas de Alicante

Durante ocho siglos, los árabes en España se convirtieron en maestros del manejo y la conservación del agua. Gran parte de este conocimiento se perdió cuando fueron expulsados ??a principios del siglo XVII.

El parque utiliza algunos de los mismos mecanismos que el aljibe . «Cuando la lluvia es demasiado fuerte y los desagües no pueden soportar todo el agua, se desvía hacia el parque«, explica Amelia Navarro, directora de desarrollo sostenible de Alicante.

«Tiene la capacidad de 18 piscinas olímpicas, aunque nunca ha alcanzado más del 30% en épocas de fuertes lluvias», explica.

Desde su apertura en 2015, se han visto alrededor de 90 especies de aves en el parque, un oasis entre los bloques de apartamentos que hay en la zona. «Introdujimos peces que se alimentan de larvas para evitar que haya mosquitos», afirma Navarro agregando que el agua se oxigena para reducir el crecimiento de algas.

 
Fotografía: Agencia JLC Creativos

Cuando las tormentas son intensas y aumenta el nivel del agua se activa una alarma acústica para advertir a las personas del parque que abandonen la zona.  El parque se cierra hasta que la lluvia amaina.

Aunque el parque es una solución inteligente a las inundaciones y relativamente económica, las autoridades intentan adaptarse a la crisis climática. Las predicciones apuntan a un 10-15% menos de agua disponible en el futuro cercano. El calentamiento global hace perder más agua a través de la evaporación y la respiración de las plantas.

A pesar de que la agricultura representa solo el 3% del PIB, ocupa el 80% del consumo de agua. El almacenamiento y el reciclaje del agua, como el diseñado por La Marjal es una buena opción ante los tiempos que vienen.

VER MÁS. GEOINGENIERÍA PARA LUCHAR CONTRA EL CAMBIO CLIMÁTICO