9 Curiosidades sobre el Arcoíris

¿Sabias que hay arcoíris dobles? y ¿qué raramente se ven a mediodía? Te desvelamos algunas curiosidades de este fenómeno óptico y meteorológico.

Mar Gómez

Mar Gómez

Este fenómeno meteorológico está rodeado de misterio y leyendas. Encontrar una mitología que no incluya el arcoíris en algún lugar puede ser el verdadero desafío. Ya sea como puente, mensajero, arqueros arco, o serpiente, el arcoíris se ha puesto en servicio simbólico durante milenios. La mitología griega asemejaba el arcoíris con los colores del vestido de Iris, mensajera de los dioses; los irlandeses esperaban encontrar un gran tesoro junto a un duende que lo custodiaba al final y los nórdicos conectaban la tierra con Asgard a través de un puente de arcoíris.

Detrás de todas estas leyendas está el fenómeno meteorológico y óptico, uno de los más espectaculares de la naturaleza. Cuando llueve y los rayos de luz entran en las gotas de agua, la luz se descompone en colores (como por ejemplo cuando la luz atraviesa un vaso de cristal) y cambia su dirección. Cuando esta luz llega al lado opuesto de la gota intenta salir de ella pero una pequeña fracción no lo consigue y se refleja hacia atrás saliendo por la cara de la gota por la que había entrado y sufriendo una nueva refracción. Debido a que las paredes de la gota son curvadas, la luz sale reflejada hacia atrás formando un ángulo de 138º respecto a la luz incidente, lo que hace que el arco iris únicamente pueda ser visto cuando nos encontramos de espaldas al sol. Esta descomposición de la luz blanca fue demostrada mediante un prisma por Newton.

Seguramente hay muchos aspectos que desconocéis del arcoíris. Os contamos algunas curiosidades:

  1. Raramente se ven a mediodía

Para que aparezca el arcoíris la luz del sol necesita atravesar la gota de lluvia en un ángulo de 42º. Esto no es posible si se encuentra en el cielo en un ángulo mayor a este como ocurre a mediodía, en el cenit.

  1. Pueden aparecer por la noche (Moonbows)

 También conocido como arcoíris lunar o arco de luna se produce en este caso por la refracción de la luz lunar sobre la lluvia o neblina nocturna. Son además muy tenues ya que la cantidad de luz que llega desde la luna es bastante escasa. Al igual que los arco iris habituales estos se encuentran siempre en el lado opuesto del cielo desde el que llega la luz de la luna. La mejor hora para verlos es cuando la luna esta baja.: justo después del crepúsculo vespertino o antes del crepúsculo matutino.

  1. Dos personas nunca verán el mismo arcoíris

Debido a que cada persona observa desde un ángulo completamente distinto, dos personas simultáneamente no verán el mismo arcoíris ya que la luz rebotada de ciertas gotas de lluvia del arcoíris que ve una persona es diferente a la que ve otra. Entre otras causas, porque dos personas no pueden estar en el mismo lugar en el mismo instante de tiempo exactamente.

  1. No existe el final

Seguro que siempre os ha dado la impresión cuando os movéis que la Luna os persigue. Lo mismo ocurre con el arcoíris. La luz que forma el arco iris lo hace a una distancia y ángulo específico para el observador por lo que sentimos decíroslo pero no podréis encontrar oro al final del arco.

  1. Existen dobles, triples y cuádruples

Menos frecuente es el arcoíris doble, el cual incluye un segundo arco más tenue con los colores invertidos, es decir, el rojo hacia el interior y el violeta hacia el exterior. Esto se explica debido a que la luz sufre más reflexiones en el interior de la gota antes de salir. No obstante, los segundos arcoíris suelen ser mucho más tenues que los primeros. Además, suelen parecer más grandes, pues salen hacia atrás en un ángulo de 130º.

El fotógrafo Wes Eisenhauer fue el afortunado cazador de este espectacular arcoíris doble casi perfecto:

  1. Puedes hacerlo desaparecer

Si no queréis verlo, con plantaros unas gafas polarizadas basta, ya que este tipo de gafas están recubiertas por una capa de moléculas alineadas verticalmente y la luz que refleja el agua se mueve horizontalmente.

  1. Existen los arcoíris sin colores

Son los conocidos arcoíris de niebla (Fogbow) que muestra el reflejo de la luz del sol debido a las gotitas del agua de la niebla. La falta de colores está en el menor tamaño de las gotitas de agua ya que se difuminan los colores al contrario de lo que ocurre en gotas más grandes, que actúan como un prisma reflejando la luz solar.

  1. No tiene siete colores

Si se trata de un espectro continuo en el que un color se va convirtiendo en otro, ¿por qué siempre hablamos de siete colores? El siete es un número con una fuerte superstición y misticismo asociado. Y es que al final del siglo XVII, siete eran los astros celestes conocidos, siete los metales usados en la alquimia, siete las notas musicales y siete los días de la semana, por lo que parece lógico que Newton designara siete colores para seguir la famosa ley de los siete. Sin embargo el rango de colores en el arcoíris es infinito.

  1. Existe un fenómeno llamado arcoíris de fuego

Es un halo o un fenómeno óptico similar en apariencia a un arcoíris horizontal, pero se diferencia en que es más corto, de mayor espesor y no es causado por la refracción de luz en gotas de agua, sino a través de cristales de hielo en nubes cirrus.